El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) utilizará USD 480 millones provenientes de la reciente emisión de bonos soberanos en el mercado internacional para financiar el déficit del Presupuesto General de la Nación. Dicho monto forma parte de una emisión total de USD 1.200 millones y se destinará a sectores estratégicos como obras públicas, vivienda y pagos de deudas con organismos multilaterales.
Según la Ley 7408/2024, que establece el presupuesto para el ejercicio fiscal 2025, el límite de endeudamiento para el año asciende a USD 714,5 millones. Con esta reciente colocación, quedaría un margen de USD 234,5 millones para futuras emisiones en el mercado local. El MEF prevé complementar estos recursos con una mayor recaudación de la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios (DNIT), estimada en USD 600 millones adicionales en comparación con el 2024.
El informe de la Tesorería General revela que, al cierre de febrero, se procesaron transferencias por G. 7,3 billones, excluyendo una deuda flotante de G. 2,4 billones. Este monto representa un incremento del 38% respecto al mismo período del año anterior, impulsado por mayores pagos en inversiones, deuda y servicios personales. En cuanto a salarios, el gasto alcanzó G. 3,2 billones, reflejando un aumento del 9,9% interanual.
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En el sector salud, las transferencias para la compra de medicamentos sumaron G. 327.791 millones, marcando un incremento del 4.579,9% en comparación con los dos primeros meses de 2024. En inversión física, el gasto fue de G. 732.075 millones, un 2.854,9% más que el período anterior. Los costos en servicios básicos también aumentaron un 43,1%.
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El pago de la deuda externa registró un crecimiento del 62%, con transferencias acumuladas por G. 739.075 millones hasta febrero de 2025. En cuanto a la deuda interna, se observó un incremento del 22%, con pagos de G. 210.333 millones en el mismo período. Según el MEF, estos aumentos reflejan el compromiso del Gobierno con la estabilidad fiscal y el cumplimiento de sus obligaciones financieras.
El desafío ahora radica en garantizar que los nuevos recursos sean utilizados de manera eficiente para evitar un mayor endeudamiento a futuro. La sostenibilidad fiscal dependerá en gran medida del cumplimiento de las metas de recaudación y del control del gasto público en los próximos meses.
Fuente: Última Hora
