El Círculo Paraguayo de Médicos reiteró su exigencia de renuncia inmediata de la ministra de Salud, María Teresa Barán, tras la muerte de un bebé en el Hospital de Villarrica, hecho que expuso graves falencias en la habilitación de la terapia neonatal. En un comunicado oficial, el gremio criticó la falta de transparencia en la gestión y señaló que los recientes cambios de viceministros y directores no resuelven el problema de fondo.
El documento cuestiona la versión oficial de la ministra sobre el funcionamiento de la terapia neonatal. Barán aseguró que la unidad estaba operativa y en condiciones adecuadas, mientras que autoridades departamentales afirman que nunca llegó a funcionar correctamente. Para los médicos, estas contradicciones evidencian falta de planificación y responsabilidad institucional.
Además, el gremio plantea una interrogante clave: si la terapia neonatal realmente no cumplía con los requisitos mínimos, ¿por qué se inauguró y habilitó? Advierten que mantener un servicio en condiciones inadecuadas puede aumentar la mortalidad neonatal, lo que demostraría una gestión irresponsable y con intereses políticos.
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El silencio de la ministra y la falta de explicaciones claras han generado desconfianza tanto en los profesionales de la salud como en la ciudadanía. El comunicado destaca que, aunque el Gobierno haya destituido al director del hospital, esto no aclara si la habilitación de la unidad neonatal respondió a un análisis técnico real o fue aprobada apresuradamente.
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Los médicos sostienen que la ministra prioriza mantenerse en el cargo antes que asumir su responsabilidad, obstaculizando así una gestión que enfrente verdaderamente la corrupción en el sistema de salud. Exigen el nombramiento de una autoridad capaz de liderar con transparencia, ética y compromiso para devolver la legitimidad a la salud pública en Paraguay.
El comunicado finaliza con un llamado urgente al Gobierno para designar a un profesional idóneo, con integridad y experiencia, que garantice condiciones dignas en el sistema sanitario y restablezca la confianza en las instituciones de salud.
Fuente: ABC Color