Política

Peña niega conflicto con Ueno y dice que fue mala inversión

Santiago Peña se defendió de señalamientos sobre un posible conflicto de intereses con Ueno Holding, asegurando que fue una inversión fallida y sin ilegalidades.

El presidente Santiago Peña. Gentileza/Presidencia de la República del Paraguay

El presidente de la República, Santiago Peña, negó rotundamente haber incurrido en un conflicto de intereses tras las acusaciones públicas que vinculan su participación accionaria en Ueno Holding con el aumento de contrataciones de la empresa con el Estado durante su gobierno. En una entrevista concedida al programa La Lupa, emitido por Monumental 1080 AM, el mandatario explicó que su inversión en la compañía fue legítima, documentada en su declaración jurada, y que decidió retirarse recientemente por considerar que fue una “mala inversión”.

Peña fue accionista de Ueno Holding hasta el 22 de marzo de 2025. La empresa forma parte de un conglomerado empresarial que adquirió notoriedad por haber incrementado sus contratos con instituciones públicas desde el inicio de la administración actual. Ante la consulta sobre si esto representa un conflicto de intereses, el presidente argumentó que no existió ninguna maniobra indebida, ya que no usó información privilegiada ni se benefició de forma ilegal.

Inversiones personales y acusaciones contra la prensa

Durante la entrevista, el jefe de Estado señaló que existe una campaña coordinada para desprestigiar su figura. Acusó a sectores mediáticos y económicos de manipular la información con el objetivo de dañar su credibilidad ante la ciudadanía. Para Peña, los cuestionamientos responden a estrategias políticas fraguadas por grupos de poder que no lograron sus objetivos en los comicios internos del Partido Colorado.

Aseguró que sus inversiones siempre fueron públicas, realizadas dentro del marco legal y reflejadas en su declaración jurada. “Fueron acumuladas a lo largo de mi carrera profesional, principalmente en el sector financiero, donde me especialicé”, declaró. También defendió la transparencia del sistema bancario, al cual calificó como “uno de los más controlados del país”.

En ese sentido, explicó que su relación con Ueno Holding se remonta a una inversión hecha en 2019 en la exempresa Credicentro, que luego evolucionó hacia el conglomerado actual. Destacó que nunca fue accionista ni tuvo participación directa en el banco Ueno, propiedad de otros socios mayoritarios, entre ellos el Grupo Vázquez.

Una mala inversión y el fin de la participación accionaria

El presidente detalló que la inversión fue desafortunada debido a que la sociedad dejó de distribuir dividendos, lo cual motivó su decisión de desvincularse completamente. Indicó que la expectativa inicial de una posible fusión entre Ueno Holding y el banco Ueno no se concretó, generando incertidumbre sobre la rentabilidad de la participación.

Cuestionado sobre cómo una mala inversión puede vincularse con una empresa que accedió a contratos estatales en tiempo récord, Peña respondió que las licitaciones fueron adjudicadas al banco, entidad en la que no tenía ninguna implicancia patrimonial ni administrativa.

Asimismo, recordó que durante su campaña electoral ya fue blanco de ataques por parte de sectores económicos que intentaron presentar su figura como dependiente de otros líderes políticos, estrategia que, según afirmó, no tuvo éxito. El mandatario subrayó que las críticas actuales son una continuidad de esa narrativa.

A disposición de la justicia y la ciudadanía

Peña manifestó estar dispuesto a rendir cuentas ante cualquier instancia, incluyendo la ciudadanía y el Poder Judicial. Insistió en que su participación accionaria fue legítima y que no tenía conocimiento de que la empresa en cuestión terminaría en medio de disputas comerciales con otros grupos.

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En sus palabras, los hechos se fueron desarrollando de manera fortuita y escaparon a su control. Por ello, optó por retirarse completamente de la sociedad para evitar más controversias. La semana pasada, el propio jefe de Estado informó públicamente su desvinculación de Ueno Holding y reiteró que nunca tuvo vínculo alguno con el banco Ueno.

El caso abre un nuevo debate sobre la necesidad de actualizar los marcos normativos para prevenir conflictos de intereses y garantizar mayor control sobre los vínculos económicos de los altos funcionarios del Estado.

Fuente: Última Hora