Varios árboles y ramas cayeron anoche debido a los fuertes vientos.
El departamento de Alto Paraná fue azotado por un intenso temporal que causó severos daños a la infraestructura eléctrica y numerosas viviendas en varias ciudades de la región. Las fuertes lluvias y vientos provocaron cortes masivos de energía, dejando a miles de familias sin este servicio básico.
Durante la tormenta registrada el jueves, aproximadamente 15.000 usuarios quedaron sin suministro eléctrico debido a la caída de 30 alimentadores de la red de distribución. El ingeniero Jorge Vázquez, representante de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), informó que las zonas más afectadas fueron Ciudad del Este, Presidente Franco y Minga Guazú, donde numerosos sectores permanecen aún sin energía.
La ANDE desplegó un contingente de 14 cuadrillas, conformadas por personal propio y de empresas tercerizadas, para realizar las tareas de reparación y restablecimiento del servicio. Gracias a estos esfuerzos, gran parte del suministro eléctrico ha sido restaurado, aunque persisten problemas en algunos barrios.
Según explicó Vázquez, el principal obstáculo para la restitución total del servicio es la gran cantidad de árboles caídos sobre las líneas de distribución. “Los equipos están concentrando sus esfuerzos en reparar las redes de media tensión, ya que los alimentadores principales han sido rehabilitados”, señaló.
Los trabajos de reparación continúan sin descanso para normalizar completamente el suministro eléctrico en toda la región. Las autoridades esperan restaurar el servicio a la brevedad posible, aunque las labores podrían extenderse dependiendo de la complejidad de los daños en cada sector.
El temporal no solo afectó el sistema eléctrico, sino que también causó considerables daños materiales en las ciudades principales de Alto Paraná. Numerosas viviendas resultaron con techos parcial o totalmente destruidos por la fuerza de los vientos, obligando a muchas familias a buscar refugio temporal.
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A pesar de la magnitud de los daños materiales, las autoridades no han reportado personas lesionadas como consecuencia del fenómeno meteorológico, lo cual representa un alivio en medio de la emergencia.
Los pronósticos meteorológicos advierten sobre la posibilidad de nuevas precipitaciones en los próximos días, lo que podría complicar las tareas de recuperación y aumentar la vulnerabilidad de las zonas ya afectadas por el temporal.
Fuente: Última Hora
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