El presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Latorre, continúa dilatando la elección del nuevo representante ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM), mientras los pasillos del Congreso se llenan de rumores sobre quién ocupará el lugar dejado vacante por Orlando Arévalo tras su salida del poder Legislativo.
Fuentes cercanas a las negociaciones confirmaron que la decisión final dependerá exclusivamente del comando político de Honor Colorado, popularmente conocido como “el quincho de la avenida España”, referencia a la residencia del expresidente Horacio Cartes donde se toman las decisiones políticas del oficialismo.
#Noticias | Diputados siguen sin tener representante ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM). Dilatan la designación del reemplazo de Arévalo.
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— Telefuturo (@Telefuturo) March 19, 2025
La vacante se produjo luego de que Arévalo fuera vinculado con el controvertido esquema para salvar a jueces y fiscales presuntamente liderado por el fallecido operador judicial Eulalio “Lalo” Gomes. Este escándalo, evidenciado a través de chats filtrados, ha deteriorado gravemente la imagen del JEM, órgano constitucional encargado de juzgar el desempeño de magistrados.
Según trascendió, Latorre habría propuesto inicialmente buscar una figura que sirviera de contrapeso en el JEM para mejorar la reputación del organismo, fuertemente cuestionado por sus resoluciones y su composición mayoritariamente afín al cartismo. Sin embargo, el presidente de la Cámara Baja ahora asegura que la definición estará recién para dentro de “dos o tres semanas”, evidenciando la estrategia dilatoria del oficialismo.
“Los diputados le propusieron a Latorre una figura de contrapeso. Él aceptó, pero se lavó las manos para tomar la responsabilidad de concretar la selección en pocos días. Están esperando una bajada de línea del quincho para actuar”, reveló a este medio un parlamentario involucrado en las conversaciones, quien prefirió mantener su identidad en reserva.
Los nombres que más suenan para ocupar la vacante son el del liberal cercano al oficialismo, Rodrigo Blanco, y el colorado José Rodríguez, hombre de confianza del influyente senador cartista Derlis Maidana. También figura en la lista la opositora Rocío Vallejos, del Partido Patria Querida, aunque su candidatura ha perdido fuerza, especialmente considerando que en reiteradas ocasiones propuso la eliminación del mismo órgano al que ahora aspira integrar.
Diputados plantean modificaciones en el JEM sin tocar la Constitución
La posible designación de Blanco ha generado divisiones dentro del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA). El diputado Adrián “Billy” Vaesken lo calificó duramente como “pseudo opositor” y anticipó que no lo respaldará. Sin embargo, otros miembros del directorio liberal consideran que Blanco podría representar “un balance y un avance” en un órgano dominado por el cartismo.
“Si es por nosotros queremos que sea Blanco, porque ese José está loco. Rodríguez sería un caso peor que Orlando Arévalo. Si se confirma eso, cualquier persona, hasta sin título, puede llegar a buenos cargos solo por ser amigo de Peña o de Cartes”, comentó a LPO un integrante del directorio liberal que solicitó no ser identificado.
El primer plazo establecido para cubrir la vacante venció el 26 de febrero, pocos días después de que Arévalo confirmara su renuncia a la Cámara de Diputados, tras haber solicitado previamente licencia en el JEM. La dilación en el nombramiento refleja la importancia estratégica que el oficialismo otorga a este órgano extrapoder, fundamental en el control del sistema judicial.
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La designación del nuevo representante ante el JEM tendrá implicaciones significativas para la justicia paraguaya, considerando que este órgano tiene la facultad de remover a jueces, fiscales y defensores públicos. El control cartista del JEM ha sido cuestionado por sectores de la oposición y organizaciones civiles, que denuncian la politización de un órgano que debería garantizar la independencia judicial.
Mientras continúan las negociaciones entre bambalinas, el sistema judicial permanece a la espera de un nombramiento que, según todos los indicios, perpetuará el dominio cartista sobre las instituciones responsables de administrar justicia. La ausencia de contrapesos efectivos en el JEM podría comprometer aún más la independencia de un poder judicial ya fuertemente cuestionado por su alineamiento con los intereses del partido gobernante.
Fuente: La Política Online