La administración de Santiago Peña ha dado una nueva señal de su alineamiento con la agenda política de Donald Trump al recibir en Mburuvicha Róga a Kevin Roberts, presidente de la Fundación Heritage, uno de los think tanks conservadores más influyentes de Estados Unidos y pieza clave en la formulación de políticas republicanas.
El encuentro, que contó con la participación del ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez, y el canciller Rubén Ramírez Lezcano, dejó en evidencia la estrategia del gobierno paraguayo de acercarse a los sectores más conservadores de Washington para posicionar al país como destino de inversiones.
La visita de Kevin Roberts, Presidente de la Fundación Heritage de EEUU a nuestro país significó la oportunidad de tratar temas clave en la promoción del Paraguay ante el mundo pic.twitter.com/b010HMRAFf
— Vocería de Gobierno del Paraguay (@voceriaparaguay) March 20, 2025
Giménez fue especialmente enfático al declarar que Paraguay está «muy alineado a esa agenda de desarrollo económico de Estados Unidos», destacando los valores compartidos como “respeto a las libertades, seguridad y al individuo como motor del progreso”.
Por su parte, el canciller Ramírez Lezcano, quien recientemente retiró su candidatura a la secretaría general de la Organización de Estados Americanos (OEA), subrayó la importancia de la cooperación bilateral en materia de seguridad hemisférica. “Abordamos la promoción de la seguridad hemisférica, la lucha contra el crimen organizado, contra el tráfico de drogas y la trata de personas. En materia de ciberseguridad, es fundamental en la agenda de cooperación internacional para nuestro país”, afirmó.
La reunión también sirvió para reforzar la posición internacional de Paraguay en temas sensibles como sus relaciones con Taiwán e Israel. “Tocamos la posición que hoy ocupa Paraguay, su coherencia y consistencia en materia de libertad, democracia, derechos humanos y Estado de Derecho”, explicó el canciller.
Kevin Roberts manifestó el interés de la Fundación Heritage en incorporar a Paraguay a sus programas de atracción de industrias y desarrollo de infraestructura. “Queremos incluir a Paraguay en esta agenda, con iniciativas en la hidrovía, materia energética orientada a la construcción de data centers y el uso de inteligencia artificial”, indicó el aliado de Trump durante una conferencia de prensa conjunta.
La Fundación Heritage, establecida en 1973, ha sido un actor determinante en las políticas republicanas, particularmente durante el primer mandato de Donald Trump, cuando tuvo un papel decisivo en la selección de jueces para la Corte Suprema y en la implementación de medidas de desregulación económica. Actualmente, la organización impulsa el denominado Proyecto 2025, una iniciativa diseñada para preparar el terreno para la nueva administración Trump.
La presencia de Ramírez Lezcano como uno de los voceros del encuentro refleja su intención de continuar fortaleciendo los lazos con Washington, a pesar de la controversia generada días atrás cuando atribuyó el fracaso de su candidatura a la OEA a un supuesto boicot de gobiernos de izquierda regionales. Posteriormente, modificó su versión alegando que se retiró porque Trump había comunicado que Estados Unidos reduciría su apoyo financiero a dicha organización.
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Sin embargo, este acercamiento a la administración Trump podría generar tensiones en la “diplomacia presidencial” que Peña ha intentado cultivar con sus vecinos regionales. Un ejemplo reciente fue la crítica del expresidente panameño Arístides Royo, quien cuestionó la falta de apoyo de Peña ante las amenazas de Trump respecto al control del Canal de Panamá. “Peña pasó por Panamá y cuando le preguntaron si apoyaba a Panamá en esta lucha que emprende sobre las afirmaciones que hace el Gobierno de Estados Unidos dijo que sería muy difícil lograr la unidad latinoamericana en este tema. Se le salió el cobre”, manifestó Royo.
Este giro en la política exterior paraguaya plantea interrogantes sobre el equilibrio que buscará mantener el gobierno entre su alineamiento con la Casa Blanca y sus relaciones con los países de la región, particularmente en un contexto latinoamericano donde coexisten gobiernos de diferentes tendencias ideológicas.
Fuente: LPO
