El Departamento de Estado estadounidense confirmó el retiro del embajador Marc Ostfield de Paraguay, una decisión que el oficialismo local interpreta como resultado directo de las gestiones diplomáticas realizadas por el gobierno del presidente Santiago Peña ante las nuevas autoridades norteamericanas.
El senador colorado cartista Derlis Maidana destacó que esta medida representa una de las primeras acciones del nuevo secretario de Estado, Marco Rubio, tras asumir sus funciones. El legislador enfatizó que la salida del diplomático responde a un trabajo sistemático de la administración Peña por reencauzar las relaciones bilaterales.
#EEUU ¿El cartismo tuvo influencia en la salida de Ostfield en Embajada?
️»Es un cambio dispuesto jerárquicamente por autoridades del Departamento de Estado a raíz de una iniciativa paraguaya que viene desde hace un tiempo atrás», senador Derlis Maidana (ANR – HC).… pic.twitter.com/0OhUXPvzee
— ABC Cardinal 730 AM (@ABCCardinal) January 22, 2025
La designación temporal de Amir P. Masliyah como encargado de negocios interino marca el fin de una etapa que estuvo caracterizada por tensiones diplomáticas, particularmente tras las sanciones impuestas por Washington a diversas figuras políticas paraguayas, incluyendo al expresidente Horacio Cartes.
Durante su gestión, que ya se encontraba en su fase final según el calendario diplomático regular, Ostfield protagonizó varios episodios que generaron malestar en el oficialismo paraguayo. El gobierno de Peña había manifestado públicamente que la actuación del embajador causó un “daño tremendo” a las relaciones bilaterales.
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El senador Maidana subrayó que las acciones del representante estadounidense durante el período electoral de 2022 y 2023 afectaron negativamente el vínculo entre ambas naciones. Sin embargo, insistió en que la postura crítica del gobierno paraguayo no respondió a “cuestiones personales”.
La salida de Ostfield se produce en un momento de transición en la política exterior estadounidense, con el reciente cambio de administración que llevó a Marco Rubio a la Secretaría de Estado. El oficialismo ve en este cambio una oportunidad para fortalecer los lazos bilaterales.
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El cartismo, que había cuestionado los anuncios de sanciones considerándolos una injerencia en asuntos internos, interpreta esta decisión como una validación de sus reclamos diplomáticos. Las autoridades paraguayas habían argumentado que dichas acciones representaban una afrenta a la soberanía nacional.
La designación del próximo embajador estadounidense en Paraguay será clave para determinar el nuevo rumbo de las relaciones bilaterales, especialmente en temas sensibles como la cooperación en materia de transparencia y lucha contra la corrupción.
Fuente: ABC Color
