El ministro de Exteriores del régimen chavista en Venezuela, Yván Gil (EuropaPress/Archivo)
La Cancillería venezolana ha anunciado una drástica reducción del personal diplomático permitido en las embajadas de Francia, Italia y Países Bajos. El canciller Yván Gil comunicó que cada representación diplomática deberá limitar su personal a tres funcionarios, medida que deberá implementarse en un plazo de 48 horas.
La decisión gubernamental incluye restricciones adicionales que limitan el desplazamiento de los diplomáticos a un radio de 40 kilómetros desde la Plaza Bolívar de Caracas, requiriendo autorización escrita de la Cancillería para cualquier movimiento que exceda esta distancia. Esta medida busca garantizar, según las autoridades venezolanas, el estricto cumplimiento de las funciones diplomáticas.
El gobierno venezolano justifica estas acciones como respuesta a lo que denomina “conducta hostil” por parte de los tres países europeos, acusándolos de apoyar a grupos opositores e interferir en asuntos internos del país. La medida se produce en un contexto de creciente tensión internacional tras las recientes elecciones presidenciales y la juramentación de Nicolás Maduro para un tercer mandato.
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Las relaciones diplomáticas se han deteriorado significativamente después de que varios países europeos cuestionaran la legitimidad de las elecciones venezolanas. El presidente francés Emmanuel Macron mantuvo conversaciones con líderes opositores venezolanos, mientras que la primera ministra italiana Giorgia Meloni reconoció a Edmundo González Urrutia como presidente electo.
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La tensión con Países Bajos se intensificó particularmente después de un incidente en septiembre, cuando Venezuela acusó a la embajada holandesa de “ocultar” el ingreso de González Urrutia en su residencia en Caracas, antes de que este solicitara asilo en España. El gobierno venezolano ha advertido que continuará tomando “acciones necesarias” según el derecho internacional.
La medida se enmarca en un contexto más amplio de confrontación internacional, donde la Unión Europea ha anunciado nuevas sanciones contra funcionarios venezolanos y ha declarado que el nuevo mandato de Maduro “carece de legitimidad”. Las restricciones diplomáticas representan una escalada en las tensiones entre Venezuela y sus socios europeos, con potenciales implicaciones para las relaciones bilaterales futuras.
Fuente: Infobae
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