Plan integral de recuperación
El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) ha presentado un ambicioso programa de saneamiento para el Lago Ypacaraí, con una inversión de USD 154 millones y un plazo de ejecución de seis años a partir de 2025. El proyecto, que cuenta con la participación del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades), abarcará un área de 1.103 km² incluyendo las subcuencas de los arroyos Yukyry, Pirayú, Costa Este, Costa Oeste, Salado y el propio lago.
El ingeniero Abelardo Martínez, de la Dirección de Agua Potable y Saneamiento (Dapsan), detalla que el proyecto contempla la construcción de sistemas de alcantarillado sanitario en Areguá, Capiatá e Itauguá. “Todas estas ciudades contarán con una única planta de tratamiento ubicada cerca de los humedales del arroyo Yukyry”, explica.
La iniciativa incluye la reconstrucción de la línea de impulsión en San Bernardino, que quedó afectada tras la construcción de la ruta Luque-San Bernardino. Este componente resulta fundamental para el funcionamiento eficiente del sistema de tratamiento de aguas residuales existente.
Un aspecto innovador del programa es la recarga de los humedales con agua tratada. “Vamos a volver a inundar los humedales, previniendo incendios y generando una recarga natural de los acuíferos”, señala Martínez. Esta estrategia no solo contribuirá a la preservación del ecosistema sino que funcionará como un sistema de filtración natural.
Estado actual y restricciones de uso
La ingeniera Viviana Piñánez, directora de la Comisión Nacional de Gestión y Manejo del Lago Ypacaraí (Conalaypa), advierte que actualmente el agua no es apta para el baño. “Los niveles están fuera de los límites establecidos por la OMS y la Resolución N° 222/02 del Mades”, indica.
Las actividades permitidas se limitan a la navegación en embarcaciones y el riego de jardines. La responsabilidad de regular el acceso recae en las municipalidades ribereñas, que deben solicitar evaluaciones de impacto ambiental.
La mayor carga de contaminación del Lago Ypacarai viene de desechos cloacales.✨
El propósito es conseguir que el agua sea apta para el contacto humano.
Claudia Crosa, Directora De La Dirección De Agua Potable Y Saneamiento – MOPC#MinaEnCasa por #lateledetodos pic.twitter.com/bw9T3UDzMB
— latele (@latelePy) December 8, 2024
Aunque actualmente no hay presencia de cianobacterias, según reportes del Centro Multidisciplinario de Investigación y Tecnología (CEMIT), existe el riesgo de su reaparición debido a los contaminantes que llegan a través de los arroyos.
El doctor Gilberto Benítez, microbiólogo del CEMIT, explica que el lago presenta un estado avanzado de eutrofización debido al exceso de nitrógeno y fósforo, producto de efluentes domésticos e industriales no tratados.
Medidas y perspectivas futuras
La legislación paraguaya contempla penas de uno a cinco años de prisión y multas de hasta 2.000 jornales mínimos para quienes viertan desechos industriales no tratados, según el artículo 8 de la Ley 716/96.
La investigación del CEMIT sobre la proliferación de cianobacterias ha sido publicada en la revista Case Studies in Chemical and Environmental Engineering, destacando la importancia científica del estudio del ecosistema.
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El crecimiento urbano continúa ejerciendo presión sobre el lago, generando más desechos y efectos negativos. La implementación del programa de saneamiento, prevista para 2026, busca establecer un sistema integral de tratamiento que minimice el impacto ambiental.
Fuente: Última Hora
