Foto: Silvio Rojas.
El Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) recibió los resultados de una consultoría que evaluó el estado actual del edificio Excélsior, ubicado en el microcentro de Asunción. El estudio, realizado por la firma Carlos Rubén López Arévalo a un costo de G. 300 millones, revela graves deficiencias estructurales y recomienda la venta del inmueble adquirido en 2009 por G. 14.000 millones.
La evaluación técnica identificó deterioros irreversibles en múltiples aspectos del edificio. Los pisos presentan fisuras y desprendimientos que imposibilitan el tránsito seguro, mientras que la estructura portante de hormigón armado muestra serios niveles de degradación. Adicionalmente, el inmueble carece de sistemas contra incendios funcionales y no cumple con las normativas básicas de accesibilidad.
La rehabilitación completa del edificio requeriría una inversión de G. 42.895.095.300, según el informe. Este monto incluye la adecuación de 6.705,9 metros cuadrados de áreas útiles para oficinas, valorada en G. 23.235 millones, además de trabajos de albañilería, reconstrucción estructural y la implementación de sistemas de seguridad y accesibilidad.
El documento enfatiza que los trabajos de revitalización son “financieramente impracticables” y establece que la relación costo-beneficio no justifica la inversión, considerando especialmente los gastos recurrentes de mantenimiento. La consultora señala que el edificio no posee la funcionalidad requerida para su uso como oficinas administrativas.
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Una evaluación previa realizada por el Ministerio de Obras Públicas en 2022 tasó el inmueble en G. 13.683.881.438, incluyendo el valor del terreno y la edificación con mejoras. Durante la gestión anterior, el MEC había iniciado un proceso de subasta con un precio base de G. 9.122 millones, que fue suspendido por la actual administración para realizar este nuevo estudio.
Actualmente, el edificio de 13 pisos se encuentra en estado de abandono y es utilizado como aguantadero por personas en situación de calle. Sus instalaciones han sido vandalizadas, perdiendo ventanas, puertas y equipamientos sanitarios, mientras que su ubicación estratégica cerca de la Costanera y el Congreso Nacional contrasta con su deterioro progresivo.
Fuente: ABC Color
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