El senador Silvio “Beto” Ovelar, representante de Honor Colorado, anticipó una inminente fragmentación en el movimiento político, señalando que la estructura actual no podrá contener a todos sus integrantes. Sus declaraciones en la Cámara de Senadores revelan las tensiones internas que atraviesa el oficialismo.
Ovelar destacó el posicionamiento estratégico de Lilian Samaniego, senadora y ex presidenta de la ANR, quien ha emergido como una voz disidente tras su enfrentamiento con el senador Antonio Barrios. El legislador resaltó la experiencia política de Samaniego, reconociendo su capacidad para identificar el momento oportuno para captar nuevos adherentes.
La disputa por el liderazgo de la disidencia colorada se perfila entre Samaniego y Arnoldo Wiens, figura visible de Fuerza Republicana. Ovelar utilizó una metáfora médica para describir la competencia: “Van a competir por quién será la ambulancia y quién será el hospital que recogerá a los heridos del cartismo”.
El parlamentario anticipó que los realineamientos políticos se intensificarán después de las elecciones municipales. Según su análisis, varios exponentes que actualmente se benefician del poder oficialista comenzarán a desmarcarse, siguiendo un patrón histórico dentro del Partido Colorado.
La compleja dinámica interna del partido se evidencia en la dificultad para satisfacer las aspiraciones de toda la dirigencia política. Ovelar recordó que numerosos referentes colorados con trayectoria significativa han atravesado períodos de ostracismo político, señalando la naturaleza cíclica de estos procesos.
El senador aprovechó para reafirmar su posición dentro del movimiento, destacando el respaldo que recibe tanto del presidente Santiago Peña como del líder del movimiento, Horacio Cartes. Enfatizó su participación activa en el Comando Político y su gestión en la Comisión de Hacienda.
La mención del ministro de la Senad, Jalil Rachid, surgió en el contexto del respaldo presidencial a su gestión. Aunque Ovelar evitó pronunciarse sobre la renovación del convenio con la DEA, interpretó la presencia de Rachid junto al presidente como una muestra de confianza continuada.
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Las declaraciones del legislador reflejan los desafíos que enfrenta Honor Colorado para mantener la cohesión interna. La anticipada fragmentación podría reconfigurar el mapa político dentro del oficialismo.
La referencia a Samaniego como una política experimentada que “no es ninguna nena de pecho” sugiere el reconocimiento de su capacidad para capitalizar el descontento interno. Su trayectoria como ex presidenta del partido la posiciona como una alternativa viable para los disidentes.
Fuente: ABC Color
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