El Gobierno evalúa la posibilidad de establecer un nuevo convenio de cooperación con la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA), tras la decisión de poner fin al esquema anterior que involucraba directamente a la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad). La intención oficial sería concentrar los recursos y acciones en una sola unidad de inteligencia dentro de la Policía Nacional, dejando atrás el modelo que separaba los esfuerzos entre Senad y Policía.
Esta medida fue comunicada formalmente a las autoridades estadounidenses el pasado 6 de diciembre, marcando el fin de la colaboración tradicional en el marco del programa SIU (Unidad de Inteligencia Sensible, por sus siglas en inglés). La idea actual del Ejecutivo es negociar ya sea un nuevo convenio o una adenda al acuerdo existente, enfocando la cooperación en una sola estructura policial, con el fin de optimizar recursos y estrategias contra el narcotráfico.
Durante las últimas jornadas, el ministro de Tecnologías de Información y Comunicación, Gustavo Villate, reiteró la postura del Gobierno sobre la “reestructuración” de esta alianza. Se asegura que la intención no es debilitar la relación con Estados Unidos, sino fortalecerla mediante una aplicación más focalizada de los recursos de la DEA en Paraguay.
Villate sostuvo además que el cese de la cooperación directa con la Senad no implica un distanciamiento con las autoridades estadounidenses. Por el contrario, se insiste en ampliar la colaboración, esta vez con una coordinación más clara y centralizada. Según sus declaraciones, se pretende lograr un “SIU-Paraguay” que unifique los esfuerzos.
El ministro también sostuvo su hipótesis sobre una supuesta filtración de la información referente a esta reorganización. Mencionó la posibilidad de que una “pichadura” —filtración generada por una persona en particular— haya propiciado la difusión de datos sensibles a la prensa internacional, en lugar de que el anuncio se realice localmente.
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Sin una respuesta formal aún de las autoridades estadounidenses, el Gobierno espera avanzar en el diálogo para establecer un marco de cooperación renovado, asegurando que la Senad mantenga un papel relevante, aunque con recursos humanos y materiales más equilibrados.
Fuente: ABC Color
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