Leidy Karina Amarilla fue hallada muerta en un baldío en Nueva Asunción, Chaco. Un pasero y su vecino fueron imputados como autor y cómplice, respestivamente. ABC
La Fiscalía ha revelado los detalles del homicidio de Leidy Karina Amarilla Cabral, la comerciante caacupeña de 43 años cuyo cuerpo fue encontrado en la colonia Loma Conché de Nueva Asunción, Chaco’i, cinco días después de su desaparición el 5 de diciembre. El relato proporcionado por uno de los imputados describe la planificación y ejecución del crimen.
Según el testimonio de Sebastián Alderete, de 30 años, quien está procesado como cómplice, el pasero Sergio Daniel Ayala González, de 35 años, le ofreció G. 500.000 para participar en el asesinato, motivado aparentemente por una deuda comercial. Los hechos ocurrieron en la vivienda de Ayala en Nanawa, donde la víctima fue citada la tarde del 5 de diciembre.
La fiscal Rosa Heinroth ha confirmado que la versión del cómplice coincide con las evidencias forenses recolectadas. El informe médico indica que la víctima sufrió un golpe en el rostro, una contusión en la cabeza y murió por asfixia por estrangulación. Los investigadores también encontraron rastros de sangre en la cabecera de la cama y restos de la sábana quemada utilizada para envolver el cuerpo.
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La relación entre la víctima y el principal sospechoso era principalmente comercial, ya que Ayala suministraba mercaderías fronterizas a Amarilla, quien las comercializaba en Caacupé. Aunque circulan audios que sugieren amenazas previas contra la víctima, incluyendo mensajes que involucran a su expareja, la fiscalía mantiene abierta la investigación sin descartar ninguna hipótesis.
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Los investigadores continúan buscando evidencias adicionales, incluyendo el teléfono celular de la víctima, que según el testimonio fue destruido con un martillo por el principal sospechoso. La fiscal Heinroth ha señalado que, aunque actualmente el caso está caratulado como homicidio doloso, la calificación podría modificarse si surgen nuevos elementos durante la investigación.
El Ministerio Público mantiene las investigaciones en curso, especialmente en relación a una serie de audios que circulan en redes sociales, donde se mencionan supuestas amenazas previas contra la víctima y sus hijos. Aunque por el momento no hay elementos que vinculen a terceros con el crimen, los investigadores no descartan ninguna línea de investigación.
Fuente: ABC Color
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