Cómo optimizar las caminatas para beneficiar el corazón
Caminar es una actividad accesible y altamente efectiva para cuidar la salud del corazón. Según la Universidad de Harvard, los adultos necesitan al menos 150 minutos de ejercicio aeróbico moderado o 75 minutos de actividad vigorosa por semana. Con pequeños ajustes en la técnica, caminar puede convertirse en un ejercicio cardiovascular aún más efectivo.
Aumenta tu velocidad y frecuencia cardíaca
1. Dobla los brazos correctamente:
El balanceo de brazos impulsa las piernas a moverse más rápido. Mantén los codos flexionados entre 85 y 90 grados y mueve los brazos hacia adelante y atrás, evitando movimientos laterales. Esto también previene la hinchazón de manos durante caminatas largas.
2. Aterriza sobre el talón:
La pisada debe comenzar en el talón, con los dedos apuntando hacia arriba al tocar el suelo. Rueda suavemente desde el talón hasta los dedos y utiliza los pies para impulsarte.
3. Impúlsate con fuerza:
Dobla la punta del pie y levanta el talón al avanzar. Este movimiento optimiza la potencia, haciendo que cada paso sea más eficiente.
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Mejora la técnica de tus pasos
4. Da pasos cortos y rápidos:
Evita alargar la zancada, ya que esto puede desacelerarte y aumentar el riesgo de lesiones. Los pasos más cortos y rápidos permiten un movimiento fluido y eficiente.
5. Mantén la pierna delantera recta:
Desde el momento en que el pie toca el suelo hasta que está debajo del cuerpo, la pierna debe mantenerse recta pero sin bloquearse. Esto reduce el impacto y facilita el impulso hacia adelante.
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La importancia de una buena postura
Mantener una postura adecuada es clave para evitar lesiones y aumentar la efectividad del ejercicio:
- Mantén el cuerpo erguido.
- Relaja los hombros y llévalos hacia atrás.
- Balancea los brazos desde los hombros.
- Conserva la columna vertebral en una posición neutral.
Un paso a la vez
Introducir cambios en tu técnica de caminata no tiene que ser abrumador. Comienza por implementar un consejo a la vez y practica cada ajuste durante una semana. A medida que los movimientos se conviertan en hábito, incorpora otros elementos. La consistencia será tu mejor aliada para lograr una técnica óptima y aprovechar todos los beneficios cardiovasculares que ofrece caminar.
Fuente: Pronto.ar