Por quinta vez, los diputados cartistas intentaron imponer un proyecto de ley que busca modificar los símbolos patrios, adoptando nuevamente las características implementadas durante la dictadura de Alfredo Stroessner. El polémico proyecto generó rechazo entre los opositores, quienes denuncian la falta de debate y análisis histórico sobre la iniciativa.
El proyecto, presentado por el diputado Yamil Esgaib (ANR, HC), propone cambios en el diseño y uso de la bandera, el escudo nacional y el sello del Paraguay. Esgaib insistió en adelantar el punto al inicio del orden del día, lo que provocó que los diputados opositores abandonaran la sesión en señal de protesta, dejando al pleno sin quórum.
La sesión ordinaria de la Cámara Baja quedó sin quórum tras el retiro de los diputados opositores, quienes calificaron la insistencia cartista como un “capricho infantil”. Rocío Vallejo (PPQ) instó a Esgaib a retirar su moción y priorizar los temas pendientes del orden del día.
El cartista José Rodríguez defendió el proyecto afirmando que “en democracia manda la mayoría”, mientras que la oposición argumentó que la propuesta carece de un debate amplio y riguroso con expertos en historia y símbolos nacionales.
El proyecto busca restablecer elementos de los símbolos adoptados durante el régimen de Stroessner, incluyendo el color rojo en la orla de los escudos y ajustes al diseño del león, el gorro frigio y la estrella de bonanza. Estas modificaciones han sido cuestionadas por expertos que las consideran una regresión histórica y cultural.
En 2013, bajo la presidencia de Federico Franco, se adoptaron las actuales características de los escudos nacionales, aprobadas por la Academia Paraguaya de la Historia como fieles a los originales.
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Carlos Pereira (PLRA) propuso crear una Comisión Bicameral de Símbolos Patrios para analizar la propuesta con historiadores y especialistas. Sin embargo, Esgaib rechazó esta iniciativa, insistiendo en su aprobación sin cambios.
El insistente debate sobre este proyecto ha provocado la suspensión de cinco sesiones consecutivas, dejando 17 proyectos de ley sin tratar. Con solo dos sesiones ordinarias restantes antes del receso legislativo, el tiempo para abordar temas urgentes es limitado.
Fuente: ABC Color
