La educación en el país enfrenta retos históricos que, según el Observatorio Educativo Ciudadano (OEC), exigen anotaciones urgentes para alcanzar el desarrollo. Inspirados por los logros recientes de la selección paraguaya en las eliminatorias al Mundial 2026, el OEC planteó las “cuatro medidas” necesarias para transformar el sistema educativo nacional.
Paraguay, según las últimas pruebas PISA, ocupa el puesto 80 de 81 países evaluados en matemáticas. Además, 9 de cada 10 estudiantes de 15 años no logra resolver problemas matemáticos básicos, y 7 de cada 10 presentan dificultades para comprender lo que leen. Esta situación refleja las debilidades estructurales de un sistema educativo que invierte apenas el 3,4% de su PIB(Producto Interno Bruto), por debajo del promedio global del 3,7%.
El primer gol, según el OEC, debe ser convertir la educación en una política de Estado, desvinculándola de intereses partidarios. Esto implica priorizar las necesidades reales de los estudiantes y erradicar prácticas como el uso de rubros docentes con fines políticos, una denuncia recurrente en el sector.
El segundo gol apunta a mejorar las condiciones de los docentes. Garantizar la formación continua y espacios adecuados para su desarrollo profesional es esencial para elevar la calidad educativa. Sin una mejora en las capacidades de los educadores, los cambios en el sistema difícilmente serán sostenibles.
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El tercer gol se centra en la educación temprana. El OEC resalta la importancia de garantizar acceso universal a programas educativos desde los primeros años de vida. Aunque la escolarización en el nivel preescolar ha aumentado, sigue siendo insuficiente, especialmente en regiones más vulnerables.
Por último, el cuarto gol se refiere al financiamiento educativo. Incrementar la inversión pública y asegurar que el gasto sea eficiente y transparente es clave para que la educación en el país abandone los últimos puestos en los rankings internacionales.
Fuente: ABC Color
