La viceministra de Capital Humano y Gestión Organizativa, Andrea Picaso, explicó los detalles de la Ley de Carrera Civil, una propuesta que busca transformar el sistema de selección de empleados públicos en Paraguay. La normativa, que reemplazaría la Ley 1626/2000, tiene como objetivo garantizar que todos los funcionarios y contratados accedan a sus cargos mediante concursos públicos, dejando solo cuatro puestos como cargos de confianza.
La ley estipula que las contrataciones deberán estar fundamentadas, al igual que las renovaciones, y establece sanciones para quienes incumplan las disposiciones. Picaso destacó que esta medida pretende eliminar los casos de ingreso “por la ventana”, un problema recurrente en las instituciones públicas del país.
«Esta ley tiene un componente esencial que marca la diferencia: le hace responsable al funcionario público que nombra sin concurso o que contrata sin concurso».
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En cuanto a los directores de instituciones públicas, la viceministra subrayó que estos también deberán concursar para ocupar sus puestos. Solo cuatro cargos quedarán exentos del concurso y podrán ser designados directamente por las máximas autoridades: asesor jurídico, jefe de gabinete, director de administración y finanzas, y secretario general.
Actualmente, la Ley 1626 ya exige concursos públicos, pero su implementación ha sido inconsistente. La nueva normativa busca reforzar esta obligación y ampliar su alcance, asegurando que los procesos de selección sean más transparentes y justos. También se establecerán evaluaciones de desempeño periódicas para los funcionarios.
La viceministra señaló que los contratos por excepción seguirán siendo posibles, pero únicamente en situaciones justificadas por necesidades coyunturales. Además, quienes ingresen por esta vía deberán participar en concursos internos para permanecer en sus cargos.
Un aspecto destacado de la ley es que los concursos estarán abiertos tanto a funcionarios actuales como a cualquier ciudadano que cumpla con los requisitos. Los directivos podrán ejercer sus funciones durante un máximo de nueve años, tras lo cual deberán retornar a sus cargos originales o desvincularse del sector público.
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Picaso afirmó que esta reforma no busca aumentar la cantidad de funcionarios públicos, sino optimizar los recursos humanos existentes. La planificación será clave para garantizar una fuerza laboral adecuada y eficiente en las instituciones del Estado.
Con media sanción en el Senado, la Ley de Carrera Civil avanza hacia un marco regulatorio que promueve la meritocracia y el respeto a la autonomía de los poderes del Estado. De promulgarse, marcará un cambio significativo en la gestión de la función pública en Paraguay.
Fuente: ABC Color
