Foto: Justin Merriman/Bloomberg via Getty Images
Elon Musk ha sido designado por el presidente electo Donald Trump para dirigir el nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), junto al empresario Vivek Ramaswamy. Este nombramiento ha generado expectativas sobre una reforma significativa en la administración pública estadounidense, enfocada en la reducción de burocracia y el aumento de la eficiencia gubernamental.
Según el comunicado emitido por Trump, Musk y Ramaswamy estarán a cargo de implementar una reforma “drástica” que busca desmantelar estructuras burocráticas, eliminar regulaciones excesivas y recortar gastos innecesarios. La iniciativa, comparada por Trump con el Proyecto Manhattan, apunta a transformar el funcionamiento del gobierno para asemejarlo a una empresa privada, con un enfoque en la optimización y reducción de costos.
El objetivo principal del DOGE es reducir el gasto público anual, estimado en 6,5 billones de dólares, mediante la eliminación de despilfarros y fraudes. Musk ha declarado que se pretende recortar hasta dos billones de dólares en gastos gubernamentales, aunque no ha detallado los métodos específicos para lograr esta reducción. Los economistas han mostrado escepticismo respecto a la viabilidad de estos recortes sin afectar servicios esenciales como la seguridad social.
Vivek Ramaswamy, por su parte, ha enfatizado la necesidad de una carrera legislativa basada en méritos y concursos públicos, con el fin de profesionalizar a los funcionarios del DOGE. Ambos líderes han manifestado su intención de realizar despidos masivos de empleados públicos y reestructurar las agencias federales para mejorar su desempeño y eficiencia.
La designación de Musk al DOGE también ha generado debate sobre posibles conflictos de interés, dado su papel como CEO de empresas como Tesla y SpaceX. Se espera que su experiencia en la gestión empresarial influya en las estrategias de reforma propuestas, aunque algunos críticos advierten sobre la concentración de poder en manos de figuras del sector privado dentro del gobierno.
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El Departamento de Eficiencia Gubernamental operará en colaboración con la Casa Blanca y la Oficina de Gestión y Presupuesto, buscando implementar cambios estructurales a gran escala. Trump ha establecido como meta la culminación de estas reformas para el 4 de julio de 2026, coincidiendo con el 250º aniversario de la independencia de Estados Unidos, con la promesa de un gobierno más pequeño y eficiente.
Fuente: El País
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