El Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPBS) enfrenta una deuda de aproximadamente G. 40 mil millones con empresas proveedoras del servicio de diálisis, un atraso que ha generado preocupación en el ámbito de la salud. Esta deuda impacta en la atención de cerca de 600 pacientes que dependen de la hemodiálisis proporcionada por el sector público.
La cartera sanitaria ha admitido que está en mora con tres empresas encargadas de brindar este tratamiento a personas registradas en el Instituto Nacional de Nefrología. Según el Dr. Jorge Cuéllar, director de dicha institución, la deuda se ha acumulado durante casi diez meses, y el pago se realiza de forma escalonada para intentar paliar la situación.
Los proveedores que esperan el desembolso operan en Asunción y el Gran Asunción, y son los responsables de atender a 580 pacientes bajo la modalidad de tercerización del servicio. A pesar del contexto financiero, el Dr. Cuéllar aseguró que la continuidad de los tratamientos está garantizada y que ningún paciente ha quedado sin sus sesiones de diálisis.
El Dr. Cuéllar también precisó que el monto exacto de la deuda está en manos de la Dirección de Administración y Finanzas del Ministerio de Salud. Explicó que se trata de un compromiso heredado de contratos previos que se han ido acumulando, pero enfatizó que el Ministerio trabaja en la cobertura parcial de los montos adeudados para evitar una mayor afectación en el sistema.
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Recientemente, el Consorcio Renal, uno de los proveedores, emitió un mensaje que se viralizó, expresando la situación de falta de pagos. No obstante, Cuéllar aclaró que, a pesar de la advertencia, el servicio no ha sido interrumpido y se mantiene la atención a los pacientes. Este comunicado fue interpretado como un llamado de atención ante el retraso de los pagos, pero sin la intención de afectar a los usuarios.
En la actualidad, el Consorcio Renal brinda tratamiento a casi 190 pacientes, quienes reciben sus sesiones regularmente. La crisis financiera, sin embargo, destaca la urgencia de solucionar los problemas de pago y la necesidad de garantizar una continuidad estable para los usuarios del sistema de salud pública.
Fuente: ABC Color
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