Bancada HC. Gentileza.
El proyecto de ley anti ONG, promovido por sectores del cartismo, se encuentra actualmente retenido en el Senado paraguayo, a pesar de haber sido sancionado el 9 de octubre. Esta decisión estratégica parece otorgar al presidente Santiago Peña más tiempo para definir su postura sobre la promulgación o veto de la polémica normativa. El argumento oficial presentado por los senadores de Honor Colorado es un “error administrativo”.
Natalicio Chase, jefe de bancada de Honor Colorado en el Senado, aseguró que la retención del proyecto responde a un descuido administrativo. Según Chase, algunas páginas del documento no fueron firmadas, lo que impide su remisión a la Presidencia. Este contratiempo habría ocurrido mientras se daba prioridad al Registro Unificado Nacional (RUN), considerado más urgente en ese momento.
Chase negó categóricamente que exista una intención deliberada de retrasar la promulgación de la ley. Sin embargo, esta dilación ha reducido temporalmente la presión sobre el presidente Peña, quien afronta pedidos de veto tanto a nivel nacional como internacional. Desde sectores de la sociedad civil hasta organismos multilaterales han expresado su preocupación por el impacto que la ley podría tener sobre las ONG en el país.
La normativa en cuestión fue impulsada por el senador Gustavo Leite, quien defiende su postura de fortalecer el control sobre las organizaciones sin fines de lucro en Paraguay. Sin embargo, organizaciones como la ONU, la OEA y Amnistía Internacional han emitido declaraciones alertando sobre el riesgo que representa esta ley para la democracia y la libertad de asociación en el país.
Un audio filtrado, atribuido a Gustavo Leite, ha generado un nuevo giro en la controversia. En él, el senador parece admitir que la ley podría enfrentarse a desafíos de inconstitucionalidad debido a sus exigencias de transparencia hacia las ONG, las cuales incluyen la divulgación de fuentes de financiamiento privadas nacionales e internacionales.
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Este incidente parece revelar discrepancias internas en el cartismo, dado que Leite en el audio expresó su descontento por las propuestas de modificación al proyecto, impulsadas por el propio presidente Peña. En sus palabras, la ley representa una herramienta crucial para monitorear las actividades de las ONG, aunque admite que podrían presentarse complicaciones legales en su implementación.
Mientras el Senado espera el regreso de su titular, Basilio Núñez, desde Taiwán para avanzar en la revisión del documento, la comunidad internacional mantiene su observación sobre Paraguay. La decisión final de Peña, sea de veto o promulgación, será clave en este debate, que ha puesto en el centro de atención el futuro de la sociedad civil.
Fuente: La Política Online
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