Un reciente estudio liderado por la Universidad de Macao, en China, ha revelado que las personas no casadas tienen un 80% más de probabilidades de experimentar síntomas depresivos en comparación con las personas casadas. La investigación, que analizó datos de más de 100.000 individuos en siete países (Estados Unidos, Reino Unido, México, Irlanda, Corea del Sur, China e Indonesia), destaca diferencias significativas entre casados y no casados, incluyendo solteros, divorciados/separados y viudos.
Los resultados muestran que la soltería se asocia con un 79% más de riesgo de síntomas depresivos, mientras que las personas divorciadas o separadas presentan un riesgo aún mayor, de hasta un 99%.
Por otro lado, las personas viudas tienen un 64% más de probabilidad de desarrollar síntomas depresivos. El estudio también encontró que el riesgo de depresión es más alto en países occidentales como Estados Unidos, Reino Unido e Irlanda, en comparación con países orientales como Corea del Sur, China e Indonesia.
In a study using individual-level data from 7 countries, Kefeng Li et al. find evidence that unmarried status is associated with a 79% higher risk of depressive symptoms.https://t.co/6NujkC15Pi
— Nature Human Behaviour (@NatureHumBehav) November 4, 2024
Un factor destacado por los investigadores es el papel mediador del consumo de alcohol, que influye especialmente en el riesgo de desarrollar síntomas depresivos en personas viudas, divorciadas o solteras de China, Corea y México. Además, el tabaquismo se identificó como un mediador causal en el aumento del riesgo en participantes solteros de China y México.
Unite a nuestro canal de WhatsApp
El estudio sugiere que el menor riesgo de depresión entre las personas casadas podría explicarse por el apoyo social que se intercambia en la pareja, una mejor situación económica y una influencia positiva mutua en el bienestar emocional. Estas dinámicas permiten un entorno más propicio para la estabilidad emocional y la resiliencia frente a desafíos.
Sin embargo, la investigación presenta limitaciones, como el uso de cuestionarios de autoinforme en lugar de diagnósticos clínicos de depresión. Además, los datos se centraron únicamente en parejas heterosexuales, lo que podría limitar la generalización de los resultados a otras configuraciones de pareja.
Fuente: ABC Color