La senadora liberal Celeste Amarilla cuestionó la reciente propuesta de reinstaurar beneficios especiales para los legisladores, entre ellos un seguro médico “VIP” y un cupo mensual de combustible, planteando en su lugar que los parlamentarios deberían aportar al Instituto de Previsión Social (IPS) como el resto de los trabajadores. La legisladora calificó estos privilegios como “una burla” hacia la ciudadanía, que enfrenta serias carencias en el sistema de salud pública y subsiste en muchos casos con ingresos por debajo del salario mínimo.
Amarilla expresó su rechazo a la medida en un contexto donde las prioridades deberían estar enfocadas en mejorar los servicios públicos. La senadora indicó que en tiempos de pandemia estos beneficios fueron eliminados, y que ahora algunos legisladores buscan restaurarlos en la Comisión Bicameral de Presupuesto 2025, la cual actualmente evalúa el Presupuesto General de la Nación para el próximo año. La propuesta incluye asignaciones mensuales de cinco millones de guaraníes para combustible y 1.200.000 guaraníes para un seguro médico privado a 80 diputados y 45 senadores.
En sus declaraciones, la senadora señaló que el intento de restablecer estos beneficios se aleja de la realidad que vive la ciudadanía, afirmando que el país no ha experimentado mejoras significativas tras la pandemia. Según Amarilla, “el seguro médico de los funcionarios públicos debería estar en IPS”, y considera que los legisladores no deberían ser una excepción. Este cambio, asegura, representaría una contribución sana al sistema previsional, beneficiando a toda la ciudadanía que depende del sistema de salud pública.
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La senadora también destacó que, de implementarse el cambio, el IPS tendría una mayor responsabilidad en asegurar la calidad de sus servicios, dado que la presencia de figuras políticas de alto perfil podría incentivar mejoras en la atención y funcionamiento del sistema. Amarilla enfatizó que el pago de aportes al IPS debería seguir el esquema tradicional: con la institución a cargo de una parte y el trabajador aportando el resto, como ocurre en el sector privado.
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En cuanto al beneficio de combustible, la legisladora recordó a sus colegas que trabajar en Asunción es una responsabilidad asumida al momento de postularse. “Los trabajadores comunes viajan a diario en transporte público sin subsidios; es absurdo que nosotros, con mejores salarios, exijamos beneficios adicionales”, subrayó. Amarilla opinó que este tipo de gastos deberían ser reconsiderados por la clase política, en un contexto donde gran parte de la población enfrenta dificultades económicas.
Fuente: ABC Color
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