La muerte de un recién nacido en el Hospital Nacional de Itauguá (HNI) ha generado una ola de indignación, tras la denuncia de los padres, quienes afirman que la tragedia ocurrió por negligencia médica. El bebé, nacido prematuro y que se encontraba a pocos días de ser dado de alta, falleció el pasado 27 de septiembre. Según el testimonio del padre, Fabián González, la causa del deceso fue un ahogamiento provocado por el vómito del bebé, tras ser alimentado por el personal del hospital.
El pequeño había pasado 47 días en cuidados intensivos debido a su nacimiento prematuro, pero en las últimas semanas su estado había mejorado considerablemente. Según González, el bebé ya no requería más que unos pocos estudios para recibir el alta médica. No obstante, debido a la demora en estos exámenes, el niño permaneció en el hospital, donde ocurrió el fatal incidente. Los padres sostienen que la muerte pudo haberse evitado si el alta hubiera sido otorgada a tiempo.
El padre asegura que el recién nacido fue alimentado de manera inadecuada por el personal del hospital, lo que provocó su ahogamiento. “Él mamaba bien, ya no tenía sonda, pero ese viernes nos dijeron que había fallecido ahogado por su vómito”, relató González. Añadió que existen testigos, otras madres presentes en la sala, que vieron cómo el personal utilizó un vasito para alimentar al bebé, un método que, según los denunciantes, no era adecuado en su estado.
El caso ha sido objeto de una investigación interna por parte del hospital, y el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPBS) ha tomado el control de la situación. El director del HNI, Miguel Ferreira, aseguró que se ha solicitado un sumario administrativo para aclarar lo sucedido. “No podemos ser juez y parte, por eso el MSPBS está a cargo de la investigación”, indicó Ferreira.
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Sin embargo, la familia del bebé sostiene que no han recibido respuesta alguna en las últimas semanas, a pesar de haber exigido explicaciones. “Nos prometieron un informe, pero después de 20 días seguimos sin respuestas”, denunció el padre. Además, la familia enfrentaba dificultades económicas, ya que son oriundos de Caaguazú y debieron costear un alojamiento durante el tiempo que el bebé estuvo hospitalizado.
El HNI no es ajeno a las críticas, ya que en los últimos meses ha sido señalado por sus deficientes condiciones sanitarias y el hacinamiento en las áreas de pediatría y neonatología. Las denuncias sobre la presencia de ratas y otras alimañas en el hospital solo han profundizado la percepción de abandono e insalubridad en una institución de salud clave para el país.
Fuente: ABC Color
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