La Fiscalía sigue con la investigación que se abrió tras la participación de un adolescente de 16 años en una carrera de caballos. Foto: Gentileza
La Fiscalía de Itapúa ha intensificado su investigación sobre un incidente ocurrido en una carrera de caballos en San Pedro del Paraná, donde un adolescente de 16 años estuvo a punto de sufrir un grave accidente. El fiscal Rolando Ortega lidera la investigación que busca esclarecer las circunstancias que permitieron la participación de un menor en este peligroso evento.
Según informes preliminares, el incidente tuvo lugar en un hipódromo de la localidad de San Miguel de Guazú Yguá, donde una multitud se congregó para presenciar una carrera de caballos tradicional. Durante la competencia, el adolescente, que montaba uno de los equinos, sufrió una caída que afortunadamente no resultó en lesiones graves.
El fiscal Ortega ha revelado que, hasta el momento, se han identificado a siete personas potencialmente implicadas en el caso, incluyendo al organizador del evento. Aunque la investigación ha mostrado “avances significativos”, el fiscal se mantiene cauteloso respecto a las posibles figuras penales que podrían aplicarse a los involucrados.
Una de las líneas de investigación se centra en la posible “violación del deber de cuidado” por parte de la responsable del menor. Ortega ha indicado que, según la información disponible, el adolescente se encuentra bajo adopción, aunque este detalle aún requiere confirmación documental.
La investigación también abarca otros aspectos del evento, como la identidad de los propietarios de los animales, la presencia de apuestas y el presunto sacrificio de un caballo tras la carrera. El fiscal enfatizó la importancia de determinar quién autorizó la participación del menor en la competencia.
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Además, Ortega señaló que este tipo de eventos deberían contar con la presencia de paramédicos y ambulancias como medida de seguridad, un aspecto que también está siendo examinado en el contexto de la investigación.
El caso ha generado preocupación en la comunidad y entre las autoridades, poniendo de relieve la necesidad de una mayor regulación y supervisión de eventos deportivos que involucren a menores de edad. La participación de un adolescente en una actividad de alto riesgo como una carrera de caballos plantea serias cuestiones éticas y legales.
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La Fiscalía ha convocado a todos los implicados para prestar declaración, un paso crucial en el proceso de recopilación de evidencias. Aunque hasta el momento no se han presentado imputaciones formales, la investigación continúa activa y podría resultar en acciones legales contra los responsables.
Fuente: Última Hora
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