La economía paraguaya enfrenta un desafío significativo con la creciente depreciación del guaraní frente al dólar estadounidense. Según datos del Banco Central del Paraguay (BCP), la moneda local ha acumulado una pérdida de valor superior al 7% desde enero hasta septiembre de 2024, situando la cotización referencial cerca de los G. 7.800 por dólar al cierre del noveno mes del año.
Esta tendencia, aunque alineada con los promedios regionales, genera preocupación en el escenario económico interno, especialmente entre importadores y agentes económicos con compromisos en moneda extranjera. La consultora Mentu destaca que, a pesar del recorte en la tasa referencial de la Reserva Federal de Estados Unidos, el tipo de cambio nominal referencial ha mostrado niveles más elevados que en meses anteriores.
El impacto de esta depreciación se extiende a diversos sectores de la economía. Los precios de productos importados como electrodomésticos, electrónicos y automóviles se ven afectados, así como los servicios profesionales que utilizan equipos importados. Además, la situación resta competitividad a los productos paraguayos en el mercado internacional, dado que otras monedas de la región, como el real brasileño y el peso argentino, han experimentado depreciaciones aún mayores.
Emil Mendoza, presidente de la Asociación de Casas de Cambio del Paraguay (ACCPy), advierte sobre la posibilidad de que la cotización del dólar se acerque a los G. 8.000 en el corto plazo. Esta proyección se basa en la expectativa de una alta demanda de divisas en el último trimestre del año, incluyendo la demanda adicional generada por los vacacionistas a principios del año siguiente.
Un factor preocupante señalado por Mendoza es la persistente salida de divisas del mercado paraguayo. Según el experto, los dólares que salen del país no están retornando al mercado local, lo que contribuye a la escasez de divisas y ejerce presión alcista sobre el tipo de cambio. Además, expresa inquietud por las operaciones con activos digitales que drenan dólares en efectivo hacia países vecinos como Bolivia.
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Para contrarrestar estas fluctuaciones, el Banco Central del Paraguay ha intervenido activamente en el mercado cambiario. Hasta el 20 de septiembre, la entidad vendió más de USD 1.180 millones al sector financiero con el objetivo de suavizar las variaciones del tipo de cambio. Sin embargo, este monto representa solo una fracción del volumen total que mueve el mercado cambiario paraguayo.
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El economista Gustavo Rivas explica que la demanda de dólares en Paraguay es permanente y supera ampliamente a la oferta disponible en el mercado. Varios actores económicos de peso requieren constantemente la moneda extranjera, creando un desequilibrio que el Banco Central intenta compensar con sus reservas. “El mercado está mucho más demandado que ofertado, la oferta es limitada”, señala Rivas.
La depreciación acumulada del guaraní, que alcanza aproximadamente 500 puntos frente al dólar estadounidense en lo que va del año, plantea desafíos significativos para la economía paraguaya. Esta situación requiere un seguimiento cercano por parte de las autoridades económicas y los agentes del mercado para mitigar posibles impactos negativos en la estabilidad financiera y el comercio internacional del país.
Fuente: ABC Color
