Pacientes y familiares de niños con diabetes tipo 1 se manifestaron hoy frente al Ministerio de Salud Pública (MSPBS) para exigir la provisión de insulina en los hospitales públicos del país. Los padres de los niños insulinodependientes señalaron que el desabastecimiento del medicamento lleva más de un mes, poniendo en riesgo la vida de sus hijos.
Ada Amarilla, una de las madres presentes en la manifestación, denunció que la insulina ultrarrápida, crucial para el tratamiento de los niños con diabetes, ha sido el insumo más afectado por la escasez. “Hace más de un mes que no recibimos insulina. Estamos desesperados, porque no queremos perder a nuestros hijos por la falta de este medicamento”, expresó entre lágrimas.
La situación es aún más crítica en el interior del país, donde no solo escasean los medicamentos, sino también los médicos especializados. Según los manifestantes, los hospitales fuera de la capital carecen de endocrinólogos, quienes son los únicos autorizados para recetar insulina. Los padres exigen una mayor dotación de médicos especialistas, así como apoyo psicológico y educación nutricional para los pacientes.
Fernando Brunaga, padre de otro niño con diabetes, afirmó que la falta de insulina comenzó a principios de 2023 y que el costo de este medicamento, que oscila entre G. 600 mil y G. 1 millón, es inalcanzable para muchas familias. “Nuestros hijos necesitan la insulina para sobrevivir, pero desde principios de este año estamos con problemas de suministro. Nunca habíamos tenido esta situación hasta ahora”, lamentó Brunaga.
La directora de Insumos Estratégicos del Ministerio de Salud, Patricia Luraschi, reconoció que hay problemas de stock con dos presentaciones de insulina: la ultrarrápida y la glargina. Sin embargo, aseguró que la situación sería regularizada en los próximos días, gracias a una licitación en curso, identificada con el ID N° 445952.
A pesar de estas promesas, los padres siguen preocupados por la situación crítica en los hospitales, especialmente en el interior del país, donde la falta de médicos especialistas y la escasez de insulina han complicado el tratamiento de los niños.
“Estamos haciendo lo que podemos como padres. Vendemos comida, hacemos rifas, lo que sea necesario para comprar la insulina. Pero no podemos seguir así, necesitamos que el Estado nos dé una solución”, comentó Amarilla, quien agregó que la comunidad afectada espera que el Ministerio de Salud resuelva este problema cuanto antes.
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El reclamo principal de los manifestantes es que se garantice el suministro continuo de insulina en los hospitales públicos y que se incremente el número de médicos endocrinólogos, particularmente en las regiones más alejadas del país.
Fuente: ABC Color
