Los pueblos indígenas del Chaco paraguayo emitieron un comunicado en el que atribuyen los recientes incendios en la región a la avaricia empresarial y a la falta de respeto por el medio ambiente. Según el documento, la destrucción del entorno natural es resultado de la búsqueda de lucro por parte de quienes consideran que el desarrollo se basa en la explotación de recursos naturales.
En el comunicado, las comunidades indígenas expresaron que el Chaco se encuentra envuelto en un “profundo dolor” debido a los incendios, recordando que la tierra es “prestada” y debe ser cuidada. “En un lugar muy frágil como el Chaco, lo más importante es la armonía, el equilibrio entre los seres vivos y no vivos”, afirmaron, haciendo un llamado a la reflexión sobre el impacto de las actividades humanas en el medio ambiente.
Los pueblos originarios señalaron que, desde tiempos inmemorables, han habitado el Gran Chaco, mientras que la presencia del “hombre blanco” en esas tierras es reciente. Criticaron la destrucción de la naturaleza, aduciendo que se han creado leyes para despojarlos de sus territorios, favoreciendo intereses privados y desconsiderando la preservación del ecosistema.
“El fuego no tiene la culpa”, declararon en su comunicado, refiriéndose a los incendios que afectan la región. Según los pueblos indígenas, la responsabilidad recae en “las manos que avivan el fuego por el lucro de los culpables”. Esta afirmación denuncia implícitamente a quienes buscan ganancias a costa de la destrucción del medio ambiente.
Asimismo, las comunidades indígenas destacaron que, si bien es importante castigar a los responsables, la pérdida de territorios es incalculable y no puede ser resarcida económicamente. “Miles de territorios en llamas, no hay dinero que pueda reponer lo perdido y los culpables saben eso”, subrayaron en el documento.
El comunicado también extiende su solidaridad al pueblo Ayoreo, al que denominan “los últimos guardianes del bosque profundo”. Afirmaron que si estas comunidades desaparecen, todo lo que se conoce del Chaco también se desvanecerá, subrayando la importancia de proteger a las comunidades indígenas y sus territorios.
“Hacemos nuestro el dolor por el agravio al Pueblo Ayoreo, de las comunidades indígenas afectadas por la sequía, por la falta de alimentos, finalmente hacemos nuestro el dolor, de los 7 millones de habitantes del territorio de Paraguay”, manifestaron, apelando a la empatía y la solidaridad de todos los ciudadanos.
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Las organizaciones indígenas hicieron un llamado urgente al Estado paraguayo para que declare al Chaco en estado de emergencia medioambiental. Además, instaron a la implementación de un modelo de vida que respete el medio ambiente, y que incluya políticas efectivas para proteger el territorio y los recursos naturales.
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El comunicado finaliza con un pedido para defender a la “madre tierra” y buscar un equilibrio que contrarreste el cambio climático. Entre las organizaciones firmantes se encuentran la Organización de Pueblo Guaraní (OPG), Organización de Pueblo Guaraní Ñandeva (OPÑ), Organización de Pueblo Manjui (OPM), Organización de Pueblo Nivaclé (OPN), Unión Nativa Ayorea del Paraguay (UNAP), entre otros.
Fuente: Última Hora
