La Policía Nacional anunció la implementación de controles intensivos en el transporte público de Asunción y el departamento Central, como respuesta a la creciente ola de asaltos violentos en buses. Esta medida, que incluye la revisión de cédulas de identidad y mochilas de los pasajeros, generó debate sobre el equilibrio entre seguridad pública y derechos individuales.
El comisario Miguel Fernández, jefe de Prevención y Seguridad del Área Central, explicó en una entrevista con Radio Monumental 1080 AM que estos controles serán selectivos y se realizarán “de acuerdo con el aspecto y la conducta que demuestra el ciudadano ”ante la presencia policial. Fernández detalló que los oficiales evaluarán los movimientos y el comportamiento de los pasajeros para determinar quiénes serán sometidos a revisión.
Ante el aumento de ola de asaltos en buses, la Policía controlará cédula y mochilas de pasajeros
️ «El chequeo se puede hacer con el número de cédula (si es que no portan la física). No todos serán molestados, buscamos dar tranquilidad a la ciudadanía», detalló el Crio.… pic.twitter.com/MKmCyO4omg
— Monumental AM 1080 (@AM_1080) August 29, 2024
Esta estrategia busca “contrarrestar la situación de inseguridad en los transportes públicos”, según Fernández, quien aseguró que se realizará “sin violar la intimidad y el derecho de terceros”. Sin embargo, esta afirmación contrasta con el artículo 33 de la Constitución Nacional, que establece la inviolabilidad de la intimidad personal y familiar, así como el respeto a la vida privada.
El comisario enfatizó que no todos los pasajeros serán sometidos a control y que se tienen instrucciones específicas para evitar abusos por parte del personal policial. En caso de irregularidades, Fernández instó a los ciudadanos a presentar denuncias, asegurando que los oficiales que cometan abusos serán puestos a disposición de Asuntos Internos.
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Respecto a situaciones específicas, como el caso de un jardinero que transporta herramientas, Fernández indicó que los policías están capacitados para discernir entre implementos de trabajo legítimos y posibles armas. Además, aclaró que en caso de que un pasajero olvide su cédula, la verificación puede realizarse utilizando el número del documento.
La medida surge como respuesta a incidentes recientes, como el asalto a un bus de la Línea 30 hace un mes, donde un grupo de delincuentes robó a los pasajeros utilizando armas de fuego y blancas. Más recientemente, un pasajero de la Línea 187 San José Obrero resultó herido de bala al intentar defender a otra pasajera durante un asalto.
Estos controles, que se reactivan periódicamente, buscan prevenir la comisión de delitos y desalentar los asaltos en el transporte público. Sin embargo, la implementación de esta medida plantea interrogantes sobre su efectividad a largo plazo y su impacto en la experiencia diaria de los usuarios del transporte público.
La policía aseguró que hasta el momento no han enfrentado resistencia por parte de los pasajeros a estos controles. No obstante, queda por verse cómo esta medida afectará la dinámica del transporte público y si logrará reducir significativamente los incidentes de seguridad sin comprometer los derechos de los ciudadanos.
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Este enfoque de seguridad pública pone de manifiesto la compleja tarea de equilibrar la necesidad de protección contra el crimen con el respeto a las libertades individuales garantizadas por la Constitución. El éxito de esta iniciativa dependerá no solo de su implementación efectiva, sino también de la aceptación y cooperación de la ciudadanía.
Fuente: Ultima Hora
