Penal de Emboscada.
En una serie de acciones destinadas a restablecer el orden y la seguridad en el sistema penitenciario paraguayo, el Ministerio de Justicia implementó cambios significativos en la administración de la Penitenciaría de Emboscada. Estas medidas fueron adoptadas como respuesta a un incidente en el que miembros del clan Rotela lograron burlar los protocolos de seguridad establecidos en la institución.
El ministro de Justicia, Rodrigo Nicora, en declaraciones a un medio local, reveló que el 1 de julio pasado se produjo una grave infracción de los dispositivos de seguridad. Se determinó que este hecho fue posible gracias a la complicidad de ciertos funcionarios y agentes penitenciarios, quienes aparentemente no cumplieron con los protocolos establecidos para el pabellón de alta seguridad donde se alojaban los miembros del clan Rotela.
Como consecuencia de una exhaustiva investigación interna, se tomó la decisión de desvincular a nueve funcionarios de la institución. Asimismo, se aplicaron medidas disciplinarias a los reclusos involucrados en el incidente, incluyendo la suspensión de visitas familiares y la restricción del tiempo de receso que se les concedía en un área específica y aislada del penal.
El Ministerio de Justicia procedió al traslado de siete reclusos al Centro de Reinserción Social de Minga Guazú el 21 de agosto. Esta acción fue comunicada oportunamente al Ministerio Público.
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Quizás el cambio más notorio fue el reemplazo del director del centro penitenciario. Tomás Bolaños fue removido de su cargo, siendo sustituido por Jesús Emmanuel Pérez Guerrero. Según el ministro Nicora, esta decisión fue tomada con el objetivo de “reencausar la administración de la Penitenciaría de Emboscada”, reconociendo que existían falencias en el control ejercido por el funcionariado.
El titular de la cartera de Justicia hizo hincapié en la naturaleza volátil del sistema penitenciario, describiéndolo como un entorno donde se administra una “problemática explosiva” que puede generar complicaciones en cualquier momento.
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En contraste con la situación en Emboscada, Nicora destacó los cambios positivos observados en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú tras el operativo Veneratio. Este operativo, llevado a cabo el 18 de diciembre de 2023, resultó en la desarticulación del clan Rotela y la recuperación del control por parte de las autoridades. A pesar de las controversias surgidas por las muertes ocurridas durante el operativo, el ministro aseguró que la realidad actual de Tacumbú es “totalmente distinta”, permitiendo incluso visitas y recorridos sin los problemas de hacinamiento que antes caracterizaban a la institución.
Fuente: Última Hora.
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