La Cámara de Senadores aprobó este miércoles la Ley de pensión universal para adultos mayores, acogiendo las modificaciones propuestas por la Cámara de Diputados. Esta normativa, que ahora pasa al Poder Ejecutivo para su promulgación o veto, introduce cambios significativos en los requisitos para acceder al subsidio, aunque sin el aumento al 50% del salario mínimo, esperado por muchos sectores.
La ley sancionada establece que el monto de la pensión será del 25% del salario mínimo vigente, lo que actualmente equivale a G. 698.000. Aunque la propuesta inicial contemplaba elevar este porcentaje al 50%, el ajuste no fue incluido en la versión final. El subsidio será revisado y reajustado conforme a las variaciones del salario mínimo, asegurando que mantenga cierta equivalencia con los ingresos mínimos establecidos en el país.
Uno de los cambios más significativos es la eliminación del censo como requisito para acceder a la pensión. Según el artículo 5 de la nueva ley, los adultos mayores que cumplan con la edad establecida solo deberán completar un formulario en la municipalidad correspondiente para ingresar al sistema de beneficios. Este ajuste busca simplificar el proceso y ampliar el acceso a la pensión.
Además, la ley contempla la inclusión de adultos mayores pertenecientes a pueblos originarios a partir de los 55 años y de aquellos con discapacidades severas desde los 60 años, siempre que cuenten con la certificación de la Secretaría Nacional por los Derechos Humanos de las Personas con Discapacidad.
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Por otro lado, la normativa crea un Fondo de Pensión Universal con la obligación de incluir al menos 30.000 nuevos beneficiarios cada año. Este fondo pretende garantizar la sostenibilidad del sistema y ampliar la cobertura de la pensión a más personas que lo necesiten.
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Aunque la aprobación de la ley representa un avance significativo, la falta de aumento en el monto del subsidio sigue siendo una preocupación para los sectores que abogan por una mayor protección social para los adultos mayores.
Fuente: Última Hora