Bomberos intentan sofocar un incendio, el lunes en la zona de Fuerte Olimpo. Foto: Abc Color.
Los incendios forestales continúan azotando el Chaco paraguayo, causando una devastación significativa en la región. Cristina Goralewski, titular del Instituto Forestal Nacional (Infona), reveló en una entrevista con ABC Cardinal que solo en la zona de Fuerte Olimpo, departamento de Alto Paraguay, más de 50.000 hectáreas de tierras fueron afectadas por las llamas entre el 1 y el 5 de agosto.
La magnitud de estos incendios ha requerido una respuesta coordinada de varias instituciones. Actualmente, un contingente de aproximadamente 80 personas, compuesto por bomberos de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), personal militar, bomberos voluntarios y peones de estancias ganaderas locales, se encuentra desplegado en Fuerte Olimpo combatiendo las llamas. Goralewski anunció que se espera la llegada de 80 personas adicionales para reforzar los esfuerzos de control del fuego.
A pesar de los avances logrados en la extinción de varios focos el día anterior, la SEN reportó la aparición de nuevos incendios en la zona. Esta situación subraya la naturaleza dinámica y persistente del desafío que enfrentan las autoridades y los equipos de emergencia en el terreno. Goralewski aseguró que, por el momento, el número de personal desplegado se considera suficiente para mantener la situación bajo control, aunque se mantienen en alerta para enviar refuerzos adicionales si fuera necesario.
Leé más: Alerta amarilla en Asunción por mala calidad del aire
En contraste con la crítica situación en el Chaco, la Región Oriental del país presenta un panorama más alentador. Goralewski informó que, si bien departamentos como Concepción, Cordillera y San Pedro son considerados “zonas de riesgo”, hasta el momento no se han reportado incendios activos significativos en estas áreas. Los “pequeños focos” que han surgido han sido rápidamente controlados y extinguidos.
Unite a nuestro canal de WhatsApp
La devastación causada por estos incendios plantea serias preocupaciones sobre el impacto ambiental y económico en la región del Chaco. La pérdida de 50.000 hectáreas en tan solo cinco días representa un golpe significativo para la biodiversidad local y los ecosistemas, así como para las actividades económicas, principalmente la ganadería, que dependen de estas tierras.
Fuente: ABC Color
Esta web usa cookies.