El Carrulim, una bebida emblemática de Paraguay, se prepara para tomar protagonismo una vez más este 1 de agosto. Esta mezcla de caña, ruda y limón, cuyo nombre deriva de la combinación de sus ingredientes principales, no es solo una bebida alcohólica, sino un símbolo de la rica herencia cultural del país.
La tradición del Carrulim hunde sus raíces en la confluencia de las creencias guaraníes y la influencia española. Los guaraníes ya utilizaban la ruda y el limón por sus propiedades medicinales y espirituales antes de la llegada de los colonizadores. La adición de la caña dio origen a la bebida tal como se conoce hoy, fusionando elementos indígenas y europeos en un brebaje único.
El consumo del Carrulim está íntimamente ligado al 1 de agosto, día de San Bartolomé en el calendario cristiano. La creencia popular sostiene que beber Carrulim en esta fecha ayuda a purificar el cuerpo y el espíritu, asegurando salud y buena fortuna para el mes entrante y el resto del año. La tradición dicta que se deben tomar siete pequeños sorbos en ayunas para obtener el efecto deseado.
Cada ingrediente del Carrulim tiene un significado simbólico profundo. La ruda, planta de propiedades medicinales y protectoras, representa la purificación y la eliminación de la mala suerte. El limón simboliza la renovación y la vitalidad, mientras que la caña aporta la energía necesaria para enfrentar el nuevo ciclo.
7 TRAGOS DE CARRULIM (no más )
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— Radio Nacional AM (@rnpy920am) July 31, 2024
Para quienes deseen preparar su propio Carrulim, es crucial iniciar el proceso el día anterior al consumo. La maceración de la ruda en la caña requiere tiempo para que la bebida adquiera sus características distintivas. Este proceso no solo asegura el sabor adecuado, sino que también se considera esencial para las propiedades purificadoras de la bebida.
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La preparación del Carrulim es relativamente sencilla, pero requiere atención a los detalles. Se comienza lavando cuidadosamente las hojas de ruda fresca y macerándolas en caña durante la noche. Al día siguiente, se agrega el jugo de tres limones grandes y unas rodajas de limón al preparado. Después de unas horas de reposo, la bebida está lista para ser consumida, ya sea fría o a temperatura ambiente.
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Es importante destacar que el Carrulim va más allá de ser una simple bebida alcohólica. Representa una oportunidad de conexión con la historia y la cultura paraguaya. Cada sorbo es una participación en un ritual que ha trascendido generaciones, una experiencia que fusiona lo espiritual con lo tradicional.
Fuente: ABC Color
