Una masiva operación de abastecimiento de agua potable fue puesta en marcha para hacer frente a la severa crisis hídrica que azota a las comunidades indígenas del Chaco paraguayo. En las primeras horas de este lunes, una caravana compuesta por 32 camiones cisternas partió desde el Cuartel General del Comando del Ejército, transportando un total de 425.000 litros de agua destinados a aliviar la situación crítica que enfrentan las poblaciones afectadas por la prolongada sequía.
El ministro de Emergencia Nacional, Arsenio Zárate, detalló en una entrevista con Radio Chaco Boreal 1330 AM que el vital líquido será distribuido entre 37 aljibes estratégicamente ubicados en el territorio chaqueño. Esta acción forma parte de un esfuerzo coordinado entre diversas instituciones estatales, contando además con el respaldo del sector privado. Petróleos Paraguayos (Petropar) contribuyó significativamente al operativo, proporcionando el combustible necesario para los vehículos que conforman la caravana.
▪️ Comunidades afectadas por la sequía
Gobierno envió 425 mil litros de agua potable al Chaco. #ElNoticiero pic.twitter.com/jqXinHtBtW
— Trece (@trecepy) July 29, 2024
La primera fase del operativo se centrará en el departamento de Presidente Hayes, abarcando las zonas de Villa Hayes, Puerto Pinasco, Pozo Colorado, Teniente Primero Manuel Irala Fernández y Villa Choferes. Posteriormente, la asistencia se extenderá hacia el departamento de Boquerón, donde numerosas comunidades se encuentran en una situación igualmente crítica. Finalmente, el operativo llegará al departamento de Alto Paraguay, completando así la cobertura de las áreas más afectadas del Chaco.
La magnitud de la crisis se refleja en las cifras proporcionadas por el ministro Zárate, quien indicó que en lo que va del año, se suministraron 15 millones de litros de agua al Chaco. Además del abastecimiento hídrico, las autoridades planificaron la distribución de 27.000 kits de víveres entre las comunidades indígenas, buscando así paliar también las necesidades alimentarias derivadas de la sequía.
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La situación es particularmente grave en el Bajo Chaco, donde aproximadamente 65 comunidades indígenas del departamento de Presidente Hayes se ven severamente afectadas. Los tajamares, que constituyen su principal fuente de agua, están al borde del agotamiento debido a la ausencia prolongada de lluvias. Ante esta realidad, los pobladores se vieron obligados a cavar pozos en busca del líquido vital, encontrando en muchos casos solo barro.
La Coordinadora de Líderes Indígenas del Bajo Chaco hizo un llamado urgente a las autoridades, solicitando no solo la provisión de agua potable y alimentos en calidad y cantidad suficientes, sino también asistencia sanitaria. Esta última petición responde a la aparición de enfermedades relacionadas con el consumo de agua no potable, un problema exacerbado por la salinidad característica del territorio chaqueño.
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La importancia de este operativo se magnifica al considerar los datos del Censo Indígena 2022, que registra un total de 140.206 indígenas en Paraguay, de los cuales 137.507 se identifican con alguno de los 19 pueblos reconocidos. Es relevante destacar que el 47% de la población indígena del país reside en el territorio chaqueño, abarcando los departamentos de Presidente Hayes, Boquerón y Alto Paraguay.
Fuente: Última Hora.
