Óscar Orué. Foto: ÚH.
Una controversia surgió tras la promulgación de un nuevo régimen de turismo que modificó significativamente el panorama fiscal para los artistas musicales del país. La medida, implementada mediante decreto presidencial, provocó una reacción inmediata y enérgica por parte de diversas organizaciones musicales, quienes advirtieron sobre las potenciales consecuencias negativas para sus agremiados.
El punto central de la disputa radica en la reducción del importe compensatorio destinado a los artistas por concepto de derechos de autor. Según las estimaciones proporcionadas por los colectivos musicales, esta modificación podría representar una disminución de hasta el 50% en los ingresos de aproximadamente 8.000 profesionales del sector. La magnitud de este impacto generó una ola de preocupación y descontento entre la comunidad artística paraguaya.
Frente a estas críticas, el director de Ingresos Tributarios, Óscar Orué, salió en defensa de la medida gubernamental. En declaraciones recientes, Orué enfatizó que la decisión forma parte de una estrategia fiscal más amplia, diseñada para beneficiar al sector en el largo plazo. El funcionario argumentó que la reducción de tasas es una política general impulsada desde la Presidencia, con el objetivo de fomentar la competitividad en diversos sectores económicos.
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Orué reconoció que, si bien a primera vista la medida puede parecer perjudicial, su implementación busca estimular un mayor volumen de comercio en el mercado paraguayo. Según su perspectiva, este incremento en la actividad económica compensará con creces la reducción inicial en los porcentajes de compensación, resultando eventualmente en ingresos superiores para los artistas.
El director también abordó la problemática de la evasión fiscal en el sector, señalando que en el pasado alcanzaba niveles de hasta un 40% o más. Orué aseguró que se implementaron mecanismos de control más eficientes para combatir esta situación, complementando así la nueva estrategia fiscal con medidas de fiscalización más robustas.
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A pesar de las protestas y preocupaciones expresadas por los músicos, Orué se mantuvo firme en su posición, rechazando categóricamente que la determinación del Gobierno vaya a causar un perjuicio al sector artístico. Por el contrario, insistió en que la combinación de una mayor competitividad y un aumento en el volumen de actividad resultará en beneficios tangibles para los artistas en el mediano y largo plazo.
Fuente: Ñandutí.
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