La Asociación Nacional Republicana (ANR) enfrenta crecientes tensiones internas tras las recientes declaraciones de su líder, Horacio Cartes, quien afirmó que “ya terminaron los movimientos” dentro del partido. Esta postura, que busca una unidad absoluta bajo el liderazgo de Honor Colorado, ha generado malestar entre las bases del partido.
Los convencionales y presidentes de seccionales han expresado su rechazo a esta imposición de unidad, interpretándola como un intento de sofocar cualquier disidencia o desafío a la conducción actual. Esta situación ha puesto de manifiesto las fracturas existentes dentro del partido gobernante.
La estrategia de Cartes y el comando político de Honor Colorado parece apuntar a consolidar su control, impidiendo el surgimiento de nuevos movimientos que puedan cuestionar su liderazgo o la gestión del presidente Santiago Peña. Sin embargo, esta táctica ha intensificado las luchas internas por el poder en varios departamentos.
Se han reportado conflictos en Cordillera, San Pedro y Alto Paraná, donde exreferentes del abdismo, ahora alineados con Cartes, están desplazando a cartistas de la primera hora. Estos movimientos han generado despidos y roces dirigenciales, evidenciando las complejas negociaciones y realineamientos dentro del partido.
Leé más: Cartes impulsa unificación del Partido Colorado antes de comicios
Cartes ha advertido que aquellos que no acaten órdenes “como un soldado republicano” serán sancionados por el Tribunal de Conducta de la ANR. Esta amenaza ha sido interpretada como un intento de silenciar críticas y mantener a raya a los dirigentes descontentos.
Sin embargo, las bases están mostrando signos de rebeldía. Un presidente de una seccional cartista de la capital expresó a LPO su desacuerdo con la imposición de una hegemonía única dentro del partido, argumentando que la ANR siempre se ha caracterizado por una sana competencia interna.
Dirigentes de Central han ido más allá, advirtiendo que ni siquiera el poder económico de Cartes podrá detener a quienes intenten hacer oposición dentro de la ANR. Anticipan que después del 15 de agosto, las movilizaciones y reclamos públicos serán “imparables”.
Unite a nuestro canal de WhatsApp
Las bases coloradas están organizando una corriente de transformación para elegir liderazgos menos sumisos a Cartes. El Consejo Nacional de Convencionales planea elegir nuevas cabezas departamentales en la primera semana de agosto, con el objetivo de tener mayor poder de negociación.
El punto central de las demandas sigue siendo el cumplimiento de las promesas electorales de Santiago Peña, especialmente en lo que respecta a la liberación de cargos para los colorados en el Estado. La resolución de este conflicto interno será crucial para la estabilidad y el futuro del partido de cara a las elecciones de 2026.
Fuente: La Política Online
Esta web usa cookies.