La ciudad de Lambaré enfrenta una crisis de infraestructura vial que generó creciente malestar entre sus habitantes. Numerosas avenidas principales, incluyendo Carretera de López, del Yacht y Cacique Lambaré, se encuentran en un estado deplorable, con baches de gran tamaño que ponen en riesgo la seguridad de conductores y peatones.
Los residentes del barrio San Antonio expresaron su frustración ante la aparente inacción de las autoridades. Silvina Fernández, trabajadora local, señaló que el municipio solo realiza reparaciones superficiales cuando son presionados por los medios de comunicación. Mientras tanto, la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap) sugirió a los vecinos recolectar firmas para iniciar el proceso de reparación de cañerías, sin ofrecer soluciones inmediatas.
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La situación obligó a los ciudadanos a tomar medidas por cuenta propia. Algunos vecinos recurrieron a contratar jóvenes voluntarios para rellenar baches con arena y cemento, asumiendo los costos de materiales y mano de obra.
El impacto de esta crisis se extiende más allá de la mera incomodidad. Gabriel Jara, residente de la zona, advirtió sobre los peligros que representan los baches, especialmente para los motociclistas durante la noche. Otros vecinos, como Rubén Chamorro, expresaron preocupación por la seguridad de los escolares que deben transitar por áreas afectadas por aguas servidas cerca del Colegio San Pablo.
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La frustración ciudadana se ve exacerbada por la percepción de que el pago de impuestos no se refleja en mejoras tangibles. Los residentes cuestionaron la falta de responsabilidad del municipio ante los daños que sufren los vehículos debido al mal estado de las calles, señalando una desconexión entre la recaudación fiscal y la inversión en infraestructura.
Fuente: Última Hora.
