Un reciente estudio realizado por investigadores del centro francés Lille Neuroscience y Cognition sugiere que la cafeína podría desempeñar un papel crucial en la ralentización de la progresión del alzhéimer, especialmente en pacientes que se encuentran en las etapas iniciales de la enfermedad. Esta investigación, publicada en la prestigiosa revista “Brain”, arroja nueva luz sobre los mecanismos subyacentes al desarrollo de esta condición neurodegenerativa.
El equipo de científicos se enfocó en analizar cómo la cafeína interactúa con ciertos receptores ubicados en las neuronas. Estos receptores, cuando aumentan de manera anormal, contribuyen a la pérdida de sinapsis y al desarrollo temprano de problemas de memoria en modelos animales de alzhéimer. Los hallazgos indican que la cafeína podría bloquear eficazmente estos receptores, potencialmente previniendo el deterioro cognitivo asociado con la enfermedad.
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David Blum, director de investigación en el Instituto Francés de Salud e Investigación Médica (Inserm) y uno de los autores del estudio, expresó que “bloqueando estos receptores, cuya actividad es superior en los pacientes con alzhéimer, la cafeína podría prevenir el desarrollo de problemas de memoria e incluso otros síntomas cognitivos y conductuale”.
Para validar estos hallazgos en humanos, se inició un ensayo clínico en el Centro Hospitalario Universitario de Lille. El estudio involucra a 248 pacientes, divididos en dos grupos: uno recibirá 400 mg de cafeína diarios, mientras que el otro grupo recibirá un placebo. El objetivo principal es evaluar el efecto de la cafeína en las funciones cognitivas de pacientes con formas tempranas a moderadas de la enfermedad de alzhéimer.
Estos resultados se suman a estudios epidemiológicos previos que señalaron una correlación entre el consumo regular y moderado de cafeína y una disminución en el riesgo de desarrollar alzhéimer. La enfermedad, caracterizada por problemas de memoria, funciones ejecutivas y orientación espacio-temporal, afecta a millones de personas en todo el mundo.
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Si los resultados del ensayo clínico son positivos, los investigadores planean lanzar un estudio de mayor envergadura. Blum señaló que “potencialmente, esto podría significar que la cafeína puede ser utilizada como medicamento para el tratamiento de esta enfermedad”, abriendo nuevas posibilidades en la lucha contra el alzhéimer.
Fuente: ABC.
