Varias personas resultaron heridas durante el enfrentamiento entre la Policía Nacional y manifestantes. Foto: Édgar Medina, ÚH
El conflicto por el desalojo de familias en el asentamiento Belén de Ciudad del Este, Alto Paraná, llegó a su fin este lunes de manera pacífica, tras horas de tensión y enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas policiales. La ruta PY07, que había sido bloqueada como medida de protesta, fue finalmente despejada, permitiendo que el operativo de desalojo se llevara a cabo sin mayores incidentes.
El comisario principal Miguel Pérez, jefe de Prevención de Alto Paraná, confirmó que la evacuación de aproximadamente 20 familias del asentamiento se realizó sin problemas una vez que los manifestantes accedieron a despejar la vía. El desalojo se efectuó a un kilómetro del lugar donde previamente se habían registrado enfrentamientos violentos.
La jornada comenzó con la llegada de cientos de agentes policiales al asentamiento Belén, ubicado en el barrio San Antonio, para ejecutar una orden judicial de desalojo. Los residentes, apoyados por vecinos de la zona, respondieron con barricadas, quema de neumáticos y lanzamiento de diversos objetos, incluyendo piedras y bombas molotov.
Durante los enfrentamientos, se reportaron varios heridos, incluyendo al comisario Jorge Cardozo, jefe de la Agrupación Motorizada de la Policía, quien recibió un impacto en la cabeza. Además, dos suboficiales de la Agrupación Especializada sufrieron lesiones en las piernas. Lamentablemente, también se registraron agresiones a trabajadores de prensa que cubrían los eventos.
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Las autoridades confirmaron la detención de dos manifestantes durante los incidentes, aunque sus identidades no han sido reveladas. Estos arrestos reflejan la intensidad de los enfrentamientos que precedieron a la resolución pacífica del conflicto.
Fuente: Última Hora
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