Internacionales

Ejército israelí admite imposibilidad de erradicar a Hamas

El principal vocero militar de Israel, Daniel Hagari, afirma que erradicar a Hamas es engañar al público, contradiciendo al primer ministro Benjamin Netanyahu.

El portavoz miliar israelí Daniel Hagari, en una base israelí. Foto: AFP

El conflicto entre Israel y Hamas ha experimentado un nuevo giro tras las declaraciones del principal portavoz del Ejército israelí, Daniel Hagari, quien aseguró que erradicar al grupo extremista del enclave de Gaza no es una meta factible. Estas afirmaciones han generado un evidente roce con el primer ministro Benjamin Netanyahu, quien insiste en continuar la ofensiva hasta lograr una “victoria total.

En dos entrevistas concedidas a medios locales, Hagari sostuvo que Hamas no desaparecerá antes de crear una alternativa a su gobierno, sumándose así a las críticas previamente expresadas por el ministro de Defensa, Yoav Gallant, quien exigió a Netanyahu un plan de posguerra. El contraalmirante fue contundente al afirmar que “decirle al público que no habrá terrorismo en Gaza, que no quedará un hombre armado, es mentira”.

Hagari enfatizó que la idea de destruir a Hamas y hacerlo desaparecer es simplemente engañar al público, ya que el grupo extremista está arraigado en los corazones de la gente y no puede ser eliminado por completo. Además, el vocero militar sugirió que muchos de los 116 rehenes, de los cuales varias decenas ya habrían muerto, serían liberados en un contexto de tregua y no mediante operaciones de rescate, contradiciendo así dos de los objetivos de la victoria total proclamada por Netanyahu.

Las declaraciones de Hagari desataron la indignación de la Oficina del primer ministro, que en un comunicado recordó que uno de los objetivos de la guerra es la destrucción de las capacidades militares y de gobierno de Hamas, y que las tropas están comprometidas con lograrlo. Ante esto, el Ejército emitió un nuevo comunicado reafirmando su dedicación a Netanyahu, pero matizando que Hagari se refería específicamente a la destrucción de Hamas como una ideología y una idea, no a sus capacidades militares.

Este episodio se suma a una serie de fricciones recientes entre el cuerpo militar y Netanyahu. El mes pasado, Hagari insinuó que la guerra no podría ganarse y que el Ejército tendría que volver constantemente a zonas previamente despejadas, a falta de un plan posguerra. Asimismo, hace unos días, el Ejército anunció un cese de hostilidades parcial para facilitar la entrada de ayuda humanitaria, decisión que Netanyahu calificó de inconcebibley que no afectaría a los combates en Rafah.

Netanyahu ha afirmado que para lograr el objetivo de destruir las capacidades de Hamas, ha tenido que tomar decisiones que no siempre son aceptadas por los líderes militares. Sin embargo, las grietas en el gobierno israelí se hacen cada vez más evidentes, y las discrepancias entre el primer ministro y el Ejército parecen ir en aumento.

Mientras tanto, la ofensiva israelí en Rafah continúa, y según informes del diario Maariv, la operación militar en esa zona podría concluir en las próximas semanas, dando paso a una fase de redadas intermitentes. No obstante, la falta de un plan posguerra y las dificultades para erradicar por completo a Hamas plantean interrogantes sobre el futuro del conflicto y la estabilidad de la región.

Las protestas antigubernamentales frente a la residencia de Netanyahu en Jerusalén reflejan el descontento de una parte de la población con su gestión del conflicto y su liderazgo en general. Las fricciones entre el primer ministro y el Ejército, sumadas a las críticas de la oposición y la presión internacional, han puesto a Netanyahu en una posición cada vez más delicada.

Unite a nuestro canal de WhatsApp

El conflicto entre Israel y Hamas sigue siendo un desafío complejo que requiere una solución integral y duradera. Las discrepancias entre el liderazgo político y militar de Israel evidencian la necesidad de un enfoque más coherente y realista para abordar la situación en Gaza. Solo mediante el diálogo, la negociación y la búsqueda de alternativas viables será posible alcanzar una paz sostenible y poner fin al sufrimiento de la población civil en ambos lados del conflicto.

Fuente: Clarín