La Gerente de Prestaciones Económicas del Instituto de Previsión Social (IPS), Vanessa Cubas, ha brindado detalles sobre el proyecto de modificación de la Carta Orgánica de la institución, que contempla elevar a 10 años el período de cálculo para el cobro de la jubilación. Esta medida, de ser aprobada, no solo afectará a los futuros aportantes, sino también a aquellos que ya se encuentran dentro del sistema.
Cubas ha confirmado que, en caso de que el proyecto de ley sea aprobado por el Congreso, todos los actuales aportantes se verán impactados por esta modificación. Aquellos que ya cumplen con los requisitos para jubilarse tienen un derecho adquirido una vez que se les concede el beneficio, mientras que los que aún se hallan aportando poseen un “derecho de expectativa”, lo que implica que también se verán alcanzados por la nueva normativa.
La funcionaria ha señalado que el objetivo de esta iniciativa es solventar problemas financieros derivados de supuestas inequidades y declaraciones irregulares que generan cuantiosas pérdidas a la entidad estatal. El IPS argumenta que existen miles de casos de trabajadores que aportan por un monto ligeramente superior al salario mínimo, pero que incrementan significativamente sus contribuciones en los últimos cuatro o cinco años previos a su jubilación, con el fin de percibir un haber más elevado.
Para evitar este tipo de situaciones, se proyecta analizar los aportes realizados durante los últimos 10 años como base para establecer el monto jubilatorio. Cubas ha indicado que se está trabajando en una fórmula que garantice un importe justo, considerando factores como la inflación y el salario mínimo legal vigente.
De aprobarse el proyecto en el ámbito legislativo, su aplicación será inmediata pero gradual, comenzando por un período de 36 meses hasta alcanzar progresivamente los 120 meses (10 años) estipulados en la propuesta.
Paralelamente, el Consejo de Administración del IPS ha decidido reducir el haber mínimo jubilatorio del 50% al 33% del salario mínimo legal, con el propósito de asegurar la suficiencia del Fondo de Jubilaciones y Pensiones, no solo para afrontar el pago de los haberes actuales, sino también para contar con recursos destinados a los futuros jubilados.
Esta política ha sido adoptada con el objetivo de recuperar gradualmente el equilibrio financiero de la institución, el cual se vio comprometido en 2020 cuando las autoridades anteriores decidieron aumentar el haber jubilatorio al 50% y luego al 75%, sin contar con una fuente de financiamiento adecuada para respaldar dichos incrementos.
La propuesta de modificación de la Carta Orgánica del IPS y la decisión de ajustar el haber mínimo jubilatorio evidencian los esfuerzos de la entidad por garantizar su sostenibilidad financiera a largo plazo, aunque estas medidas generarán un impacto significativo en los aportantes actuales y futuros del sistema previsional paraguayo.
Fuente: Última Hora
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