Cada 21 de mayo se celebra el Día Mundial de la Salud Visual, con el objetivo de sensibilizar sobre la importancia del cuidado de la vista. La salud visual no solo afecta la calidad de vida de las personas, sino también su educación, empleo, autoestima y potencial socioeconómico. Según expertos, el 80% de los casos de pérdida de visión pueden prevenirse con consultas oftalmológicas tempranas, siendo las cataratas y los errores refractivos las principales causas.
Desde el nacimiento, es fundamental realizar evaluaciones oftalmológicas periódicas. Los niños deben ser examinados al nacer, a los 3 y 6 meses, y al cumplir un año. Luego, deben seguir con controles anuales hasta la adolescencia. La creciente prevalencia de la miopía, vinculada al uso intensivo de dispositivos digitales y la falta de actividades al aire libre, subraya la necesidad de estos chequeos.
Para los menores de 2 años, se recomienda evitar la exposición a dispositivos digitales. Hasta los 12 años, su uso no debe exceder las 2 horas diarias. Los adultos, a partir de los 40 años, pueden experimentar presbicia, una condición que dificulta enfocar objetos cercanos y se corrige con lentes adecuados. El glaucoma, otra preocupación significativa, es la principal causa de pérdida irreversible de visión en adultos y puede ser detectado en controles rutinarios.
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Para mantener una buena salud visual, se recomiendan varias prácticas. Realizar controles anuales con un oftalmólogo es esencial. Además, una dieta equilibrada y ejercicio regular son fundamentales. Otros consejos incluyen no frotarse los ojos, ajustar correctamente el brillo y la altura de las pantallas, parpadear frecuentemente, y usar lentes adecuados de locales autorizados. La regla 20-20-20, que consiste en apartar la mirada de la pantalla cada 20 minutos durante 20 segundos y enfocar un objeto a 20 pies de distancia, también es una medida útil para descansar la vista.
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En este Día Mundial de la Salud Visual, se recuerda la importancia de estos hábitos y la necesidad de evitar la automedicación para proteger nuestra visión a largo plazo.