El diputado Daniel Centurión. Gentileza.
En un movimiento estratégico que promete sacudir las bases del Partido Colorado, líderes de Fuerza Republicana y otros movimientos disidentes a la línea verticalista de Horacio Cartes se encuentran en proceso de reagrupación con el objetivo de respaldar a Santiago Peña de cara a las próximas elecciones municipales y presidenciales. Esta jugada política se produce en medio de un intento por reflotar el peñismo y contrarrestar la influencia del cartismo dentro de la ANR.
Los grupos colorados opositores han llegado a la conclusión de que aliarse o coquetear con el cartismo es entrar en una contienda electoral con desventaja. Enfrentar a figuras prominentes como Basilio “Bachi” Nuñez, Raúl Latorre o los Zacarías Irún en Alto Paraná se presenta como una tarea ardua y costosa, lo que ha impulsado a estos sectores a buscar alternativas para consolidar su posición dentro del partido.
Ante este escenario, senadores como Lilian Samaniego y su hermano Arnaldo, Mario Varela, el diputado Daniel Centurión, el exvicepresidente Juan Afara y otros miembros del Congreso han alcanzado un acuerdo para unir fuerzas a nivel nacional y dar vida a una nueva agrupación interna en la ANR. Se espera que este novel movimiento político revele su nombre en las próximas semanas, marcando así un hito en la reconfiguración del panorama político colorado.
Uno de los dirigentes involucrados en este proceso declaró a LPO: “Esta semana iniciamos una gira por varios departamentos para cerrar acuerdos con los diferentes gobernadores, concejales, intendentes y dirigentes en base a esta unidad macro de los sectores disidentes, no a Santiago Peña, pero sí a Horacio Cartes. No es un movimiento anti, pero sí de oposición”.
La nueva fuerza colorada tiene como objetivo principal reflotar el “peñismo”, incorporando en sus filas a todo dirigente, ya sea senador, diputado o gobernador, que manifieste su apoyo al presidente Peña, pero que al mismo tiempo mantenga su rechazo al estilo de hacer política de Cartes y una parte del comando de Honor Colorado. Esta estrategia busca consolidar una base sólida de respaldo al mandatario, al tiempo que se distancia de las controversias que rodean a la figura del ex presidente.
La confirmación de este nuevo bloque colorado se alinea con lo anticipado por este medio sobre la tendencia de varios miembros del gabinete a despegarse de Cartes, quien enfrenta fuertes discrepancias con su círculo más cercano sobre asuntos sin resolver que hoy le quitan el sueño, como su situación judicial y la hostilidad de la administración Biden.
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La aparición de esta nueva fuerza política busca marcar una mayoría tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, y al mismo tiempo rearmar las bases de cara a las primeras contiendas municipales, posicionando candidatos a intendentes y juntas municipales. Otro político involucrado en el armado afirmó: “Este grupo irá definiendo candidaturas de intendente y concejales que estarán bajo un mismo equipo político para enfrentar al cartismo. Será la segunda mayor fuerza política de disidencia dentro de la ANR”.
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En los próximos días, se llevarán a cabo reuniones en Alto Paraná, Central e Itapúa para presentar la propuesta a la dirigencia y avanzar en la unidad de la disidencia. Este movimiento promete reconfigurar el tablero político dentro del Partido Colorado, generando nuevas alianzas y desafiando la hegemonía del cartismo.
Fuente: LPO
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