El dinero de la venta de la costanera no será para inversión, sino para salvar gasto en salarios. Gustavo Machado
La administración del intendente de Asunción, Óscar “Nenecho” Rodríguez, enfrenta una complicada situación financiera que ha llevado a la Municipalidad a tener dificultades para pagar préstamos adquiridos en 2023 destinados al pago de salarios. En este contexto, el jefe comunal se defendió y justificó las medidas tomadas para hacer frente a la crisis.
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En declaraciones a ABC Cardinal, Rodríguez calificó como una “herramienta válida” el pedido realizado a dos bancos para diferir el pago de tres cuotas de préstamos, lo que, según él, permitirá a la Comuna cumplir con sus obligaciones sin caer en mora. Estos préstamos, de G. 120.000 millones cada uno, fueron solicitados al Banco Continental y al GNB.
Revelando un cambio en sus promesas anteriores, el intendente admitió que se esperaba utilizar los ingresos del sistema de estacionamiento tarifado para cubrir los pagos de la deuda, a pesar de haber anunciado en reiteradas ocasiones durante 2023 que estos fondos serían destinados a inversiones en infraestructura de la ciudad. La implementación del estacionamiento tarifado fue suspendida debido a serios problemas técnicos.
Además, Nenecho mencionó que se aguardaba, a principios de año, el pago de deudas que instituciones estatales mantienen con la Municipalidad, pero estos pagos se realizarán finalmente en el segundo semestre. En cuanto a la venta de terrenos en la Costanera, argumento utilizado en las cartas enviadas a los bancos, el intendente aclaró que se trata de un “reaseguro” para las entidades financieras.
Por su parte, el director de Administración y Finanzas, Edwin López, explicó que la decisión de endeudarse fue tomada con el objetivo de llevar a cabo varias obras, como los desagües pluviales. Aseguró que la próxima administración recibirá una ciudad con mejor infraestructura y mayores ingresos tributarios gracias a estas inversiones.
López detalló que el presupuesto municipal ronda los 270 millones de dólares y que una cuenca pluvial como la que se está iniciando en el Abasto tiene un costo aproximado de 25 millones de dólares. Reconoció que estas inversiones tendrán un impacto negativo a corto plazo, pero defendió el uso de herramientas financieras para evitar la paralización de las obras.
Aunque aceptó que el diferimiento de pagos es un recurso poco utilizado, López justificó su aplicación en esta ocasión debido a que los ingresos proyectados para los primeros meses del año no se concretaron como se esperaba. Aseguró que la Municipalidad está recaudando un poco más, pero que las inversiones son cuantiosas.
El director de Administración y Finanzas afirmó que normalmente el déficit temporal de caja comienza a saldarse desde febrero, pero que en este momento se enfrentan a una situación especial debido al enfoque de la administración actual en la realización de obras.
Fuente: ABC Color
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