A criterio del vicepresidente de Diputados, Carlos Arrechea, “en algunos casos” pesa más ser colorado para acceder a un cargo dentro de la función pública. Foto: Última Hora.
La reciente votación en la Cámara de Diputados para evitar la suspensión del diputado cartista Yamil Esgaib (ANR, Honor Colorado), acusado de actos de violencia contra mujeres periodistas, ha puesto en evidencia la posibilidad de nuevas deserciones hacia el movimiento Honor Colorado. Algunos legisladores, como el vicepresidente primero de la Cámara Baja, Carlos Arrechea, han anunciado su posible retorno al cartismo, junto a otros miembros de la bancada ANR B (oficialista).
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Arrechea, junto a los diputados Rubén Rousillón, Juan Manuel Añazco y Francisco Petersen, todos electos por Fuerza Republicana y ahora devenidos a oficialistas, votaron directamente con los cartistas para salvar a Esgaib. Al ser consultado sobre su posible retorno a Honor Colorado, donde ya estuvo hasta 2018, Arrechea lo dio casi por hecho, destacando el trato cordial que ha recibido por parte del presidente del Partido, Horacio Cartes.
El diputado también mencionó que el gobernador de Misiones, Richard Ramírez, perteneciente a su equipo político, requiere el apoyo del Ejecutivo para llevar adelante proyectos y programas en beneficio de la gente.
Arrechea insistió en que las puertas de Honor Colorado están abiertas y que hay un buen relacionamiento y respuesta tanto del presidente del Partido como del Presidente de la República, quien también forma parte del movimiento.
Por otro lado, Daniel Centurión (ANR, Fuerza Republicana) negó que su abstención en la votación implique un pase al cartismo. Centurión afirmó que se mantendrá en la disidencia por una cuestión de convicción política, rechazando la lógica política del «autócrata» Horacio Cartes. El diputado alegó que, una vez que la bancada de Honor Colorado cerró filas, su voto o el de la oposición no hubiera podido cambiar la decisión.
Centurión también se desmarcó de las afirmaciones de los cartistas, quienes plantearon posibles restricciones a la labor de la prensa, incluyendo evitar preguntas incómodas para los legisladores. El diputado enfatizó que la prensa debe tener libre acceso y que los agentes públicos están obligados a responder todas las preguntas.
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La votación para salvar a Yamil Esgaib de la suspensión no solo ha generado críticas por el mensaje que envía contra la libertad de prensa, sino que también ha expuesto la fragilidad de las lealtades políticas dentro de la Cámara de Diputados. El posible retorno de algunos legisladores al cartismo podría tener un impacto significativo en la dinámica política del país.
Es importante destacar que la migración de diputados hacia el movimiento Honor Colorado no solo responde a afinidades ideológicas, sino también a intereses políticos y a la búsqueda de apoyo del Ejecutivo para proyectos en sus respectivos departamentos.
Fuente: ABC Color
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