Un estudio realizado por el Foro Económico Mundial, en el marco del informe “Competencia: ¿El ingrediente que falta para crecer?” del Banco Mundial, ha puesto de manifiesto la debilidad de Paraguay en cuanto a la efectividad de sus prácticas antimonopolio.
Según los resultados presentados, nuestro país se encuentra entre aquellos con menor capacidad para proteger la competencia, lo que podría tener un impacto negativo en el desarrollo de las empresas y la economía en general.
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El economista en jefe para América Latina del Banco Mundial, William F. Maloney, destacó que la falta de competencia en la región permite que algunas empresas mantengan grandes márgenes de ganancias, lo que se traduce en mayores precios para los ciudadanos. Además, esta situación desalienta el crecimiento empresarial y la incorporación de tecnología e innovación, poniendo en riesgo los puestos de trabajo.
“Si fortalecemos las autoridades de competencia regional, esto puede ayudar a aumentar la productividad y las ventas”, afirmó Maloney, subrayando la importancia de contar con instituciones sólidas que velen por la libre competencia.
El estudio del Foro Económico Mundial evaluó la efectividad de las prácticas antimonopolio en una escala del 1 al 7. Paraguay obtuvo una puntuación de 2,9, ubicándose al mismo nivel que Argentina. Por debajo de nuestro país se encuentran Malí (2.0), Venezuela (2.2), República Dominicana (2.4) y Nicaragua (2.8), lo que evidencia la necesidad de fortalecer las políticas de competencia en la región.
Según reveló el informe, las agencias de competencia en América Latina enfrentan desafíos en términos de financiación, independencia y percepción de debilidad. Estos factores limitan su capacidad para asegurar un entorno competitivo que favorezca el desarrollo económico.
Maloney enfatizó la importancia de fomentar la competencia, señalando que “necesitamos más competencia, que debe ir de la mano de la capacidad de las empresas y las políticas públicas que favorecen a la competencia, incrementando la innovación”.
El reciente informe del Banco Mundial destaca que la promoción de la competencia es fundamental para reactivar la economía y recuperar la confianza de los inversores. En este sentido, se vuelve imperativo que los países de la región, incluyendo Paraguay, fortalezcan sus instituciones y políticas antimonopolio para garantizar un entorno empresarial justo y competitivo.
La debilidad en las prácticas antimonopolio no solo afecta a las empresas, sino que también tiene un impacto directo en los consumidores, quienes se ven perjudicados por precios más altos y una menor variedad de productos y servicios. Además, la falta de competencia puede desalentar la inversión extranjera y limitar el potencial de crecimiento económico del país.
Fuente: Última Hora
