Tras una semana de luchar por su vida, la beba Milagros de Jesús, quien había sido dada por muerta en el Hospital Regional de Ciudad del Este y mostró signos vitales antes de su sepelio, falleció anoche en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) de un sanatorio privado.
Según relató Zunilda Medina, tía de Milagros, la bebé sufrió un paro cardíaco aproximadamente a las 21:00 horas, y a pesar de los esfuerzos de los médicos por reanimarla, no lograron salvarla. La noticia ha sido aún más dolorosa para la familia debido a la esperanza que tenían de que la pequeña saliera con vida del sanatorio.
Los médicos habían advertido sobre la delicada condición de Milagros debido a su prematurez extrema, pero la familia mantenía la fe en su recuperación. Medina agradeció a las personas que apoyaron a la familia durante este difícil momento y expresó que recordarán a la beba como una luchadora que dejó como legado el no rendirse fácilmente.
El cuerpo de Milagros fue entregado a sus familiares anoche, y sus restos ya descansan en el panteón construido en la casa familiar, ubicada en el kilómetro 15 del distrito de Minga Guazú.
La beba, de 27 semanas de gestación y con un peso de 450 gramos, había nacido el viernes 12 de abril en el Hospital Regional de Ciudad del Este sin presentar signos vitales. Fue declarada fallecida y entregada a sus familiares, pero media hora antes del sepelio, un tío notó que se movía en su ataúd.
Inmediatamente, fue trasladada de vuelta al hospital y, por orden judicial, remitida a la UTI de un sanatorio privado, donde luchó por su vida durante una semana antes de fallecer.
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Por otro lado, la madre de Milagros, de 25 años, sigue internada bajo cuidados intensivos en el Hospital Regional, pero los médicos informaron a sus familiares que están aguardando una cama para trasladarla a una sala común, ya que su evolución es favorable.
Fuente: ABC Color
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