La propuesta de aumentar de tres a diez años el período de cálculo para el cobro de la jubilación en el Instituto de Previsión Social (IPS) ha generado una ola de indignación entre los asegurados. Esta medida, anunciada por el consejero obrero Víctor Insfrán, podría provocar una reducción del 40% en el monto de las pensiones, lo que ha llevado a manifestaciones frente a la caja central de la Previsional.
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Los jubilados, acompañados por la Corriente Sindical Clasista, no solo rechazan esta iniciativa que afectaría gravemente sus ingresos, sino que también denuncian despidos masivos de trabajadores contratados y recortes en los servicios de farmacia del Hospital Ingavi. Estas acciones, según los manifestantes, comprometen la atención médica y el acceso a medicamentos e insumos para los asegurados.
Eduardo Ojeda, representante de la Corriente Sindical Clasista, calificó la propuesta de extensión del cálculo jubilatorio como una «estafa a los trabajadores» y alentó a todos los asegurados a alzar su voz en defensa de sus derechos adquiridos.
Cuestionó, además, la justificación de esta medida, considerando las reservas técnicas de USD 2.500 millones que posee el IPS, a pesar de los casos de corrupción y negociados denunciados.
La falta de insumos y medicamentos en el sistema previsional también fue señalada como una vergüenza por los manifestantes. Ojeda criticó que, a pesar de los aportes crecientes de los trabajadores, los asegurados no tienen acceso a los recursos necesarios para su atención médica. Exigió un informe detallado sobre la gestión del IPS y anunció futuras acciones para abordar estos problemas con las autoridades competentes.
La lucha de los jubilados por sus derechos no se detendrá. Las próximas manifestaciones previstas para el 1 de mayo frente al Panteón de los Héroes serán una oportunidad para visibilizar aún más sus reclamos y exigir respuestas concretas por parte del IPS.
Fuente: ABC Color
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