Puente de La Amistad. Foto: Gustavo Rodríguez.
Cada vez más compatriotas invierten dinero en gestionar una residencia brasileña para acceder a tratamientos y estudios médicos gratuitos en el vecino país, que en Paraguay tienen altos costos.
Los paraguayos que van a Foz de Iguazú por problemas de salud suelen necesitar análisis y terapias más complejas, como enfermedades renales, cardíacas, oncológicas, etc. Consideran que el sistema de salud brasileño es superior.
Uno de ellos, que padece una afección cardíaca, se realizó gratis un estudio que en Paraguay costaba G. 3,2 millones. Solo tuvo que sacar su CPF (registro brasileño) mediante gestores con contactos en Foz.
Estos tramitan un domicilio falso para cumplir con la exigencia de residencia. El control es aleatorio, y si se detecta el engaño se anula el CPF. Luego se obtiene la tarjeta SUS para acceder a la red de salud pública y privada.
Aunque es una trampa, muchos la consideran válida ante problemas de salud sin cobertura. El trámite con gestores cuesta unos G. 4 millones, muy por debajo del ahorro en tratamientos.
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Brasil exige residencia para atención, no como Argentina. Conocer a los gestores y arriesgarse a algún control es la opción para beneficiarse gratuitamente.
Fuente: Última Hora.
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