En la Escuela Robustiano Dávila, situada en el Barrio Ka’aguy Rory de Encarnación, Itapúa, fue denunciada la distribución de meriendas escolares ya caducadas por parte de la Gobernación del departamento.
Este incidente generó una considerable alarma entre los padres de los alumnos, quienes expresaron su preocupación por las implicancias que esto podría tener en la salud de los niños y niñas afectados.
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Las acusaciones surgieron luego de que padres de los estudiantes proporcionaran evidencia fotográfica a medios locales, mostrando que los productos, específicamente turrones, habían superado su fecha de caducidad el 29 de enero de 2024. Esta situación se dio a conocer cuando, el miércoles 28 de febrero, se entregaron estos alimentos a los estudiantes.
Un padre, al hablar sobre el incidente, reveló que su hijo trajo uno de estos turrones a casa, el cual fue colocado en el refrigerador. Al día siguiente, otro miembro de la familia descubrió que el producto estaba vencido antes de su consumo. “Gracias a Dios mis hijos no llegaron a comer este producto vencido. Imagínese si se intoxicaban, ¿quién asumiría la responsabilidad por esta situación?”, expresó el preocupado padre.
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La comunidad educativa y los padres de familia manifestaron su descontento y preocupación, solicitando una pronta intervención de las autoridades competentes para investigar cómo se permitió la distribución de alimentos no aptos para el consumo a los estudiantes.
Hasta el momento, la Gobernación de Itapúa no emitió un comunicado oficial en respuesta a las denuncias. Sin embargo, se espera que las autoridades pertinentes tomen medidas inmediatas para abordar las preocupaciones de los padres y garantizar que incidentes similares no se repitan en el futuro.
Fuente: Última Hora.
