En un reciente descubrimiento se reveló que los telefonistas del Congreso Nacional perciben salarios que varían entre los G. 8.500.000 y G. 21.000.000.
Este hecho, que salió a la luz gracias a una investigación periodística, plantea serias preguntas sobre la eficiencia y justificación de los gastos en la administración pública.
Juana Claudia Melgarejo, quien ocupa el puesto de directora de la Central Telefónica del Congreso, es una de las funcionarias con mayor remuneración en esta área, alcanzando más de G. 21 millones mensuales.
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Junto con otros dos empleados, su equipo se encarga de “orientar y transferir” las llamadas que ingresan a la sede legislativa. El salario combinado de estos tres empleados asciende a más de G. 40 millones al mes.
En una conversación con radio Monumental 1080 AM, Melgarejo explicó las funciones que desempeña en su área, resaltando la importancia de tratar con amabilidad y proporcionar información precisa a la ciudadanía. Con 23 años de experiencia en la Central Telefónica, enfatizó el valor del servicio humano frente a las centrales automatizadas, asegurando que ofrecen mayor seguridad y orientación a quienes llaman desde fuera.
Central Telefónica del Congreso le cuesta más de G. 40 millones al Estado
La Central Telefónica del Congreso cuenta con una directora (G. 21.357.700), una jefa (G. 11.050.000) y un encargado (G. 7.800.000).
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— Monumental AM 1080 (@AM_1080) January 24, 2024
El equipo de la Central Telefónica está compuesto por la directora, una jefa y un encargado, todos con salarios considerables y responsabilidades similares que incluyen atender llamadas, orientar y derivar.
La directora recibe un total de G. 21.357.700, que se desglosan en salario base, gastos de representación y bonificación por responsabilidad. Por otro lado, Jacqueline Sola, jefa de la Dirección de Central Telefónica, tiene un salario de G. 11.050.000, mientras que Hermes González, encargado de la Central, percibe un total de G. 7.800.000.
Estas cifras generaron interrogantes sobre la necesidad de mantener a tres telefonistas en lugar de optar por sistemas automatizados. Melgarejo defendió la importancia de su equipo, argumentando que proporcionan una atención más personalizada y segura a las personas que contactan al Congreso. Aseguró que están capacitados para asumir otras funciones en caso de que la oficina deje de operar.
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Según datos proporcionados, los tres atienden aproximadamente 80 llamadas en un lapso de seis horas, desde las 07:00 hasta las 13:00, operando una mesa que, según Melgarejo, “no puede dejar de funcionar”.
Además, en la Dirección de Transporte del Senado, se destacó que nueve trabajadores, seis de ellos en cargos de jefatura, se encargan de gestionar tres subalternos.
Este escenario plantea un dilema en el manejo de los recursos estatales, ya que el Estado paraguayo desembolsa mensualmente alrededor de G. 100.975.145 en salarios para estos trabajadores.
Fuente: Última Hora.
